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Elda

Rastrear el pasado bajo el suelo

Investigadores de la Universidad de Cádiz usan un georradar para buscar en el subsuelo de Elda restos de refugios antiaéreos de la Guerra Civil

La Unidad de Geodetección de Patrimonio Histórico hizo ayer una prospección en el espacio de protección arqueológica de la costa alfasina. información

Investigadores de la Universidad de Cádiz (UCA) rastrean puntos claves de la ciudad de Elda a la búsqueda de vestigios de los refugios antiaéreos de la Guerra Civil española. El georradar con el que cuenta la facultad andaluza escanea varios puntos del casco urbano como la Plaza de la Constitución, la del Matadero, la del Sagrado Corazón y también profundiza en las entrañas, todavía no excavadas, del yacimiento El Monastil.

La imponente máquina llama la atención de los viandantes. Sobre la calzada, poco a poco,va obteniendo imágenes del subsuelo de hasta cuatro metros de profundidad. Así realiza una evaluación de los materiales que componen la parte escondida de la ciudad, donde se oculta la vida pasada y los tesoros de carácter histórico.

La radiografía del subsuelo quiere confirmar el lugar donde se encuentran los refugios antiaéreos así como el punto exacto de entrada a ellos y sus galerías. Dentro de los proyectos de la concejalía de Patrimonio, la recuperación de parte del sistema de defensa pasiva en la contienda nacional es uno de los más inmediatos y los trabajos del georradar son esenciales para investigar este periodo sin tener que abrir las calles de la ciudad en canal. De estos pasadizos queda casi todo por saber y éste es un primer paso para aportar luz sobre su arquitectura.

El arqueólogo municipal, Juan Carlos Marquez, ha explicado que «en lugares de los que tenemos indicios o constancia de restos arqueológicos permite -sin movimiento de tierra y sin procedimientos invasivos- detectar restos como muros que nos ayudan a dilucidar donde están las construcciones».

También parte del yacimiento arqueológico de El Monastil se recorre con estas nuevas tecnologías para evaluar donde existen restos, con el fin de desvelar donde realizar las excavaciones arqueológicas futuras con una mayor precisión. Asimismo se pretende descubrir hasta dónde llega la trama urbana del asentamiento íbero romano, una información que puede aportar datos fundamentales a las investigaciones de los historiadores.

La técnica posibilita ahorrar dinero y por otra parte, perfilar estrategias o posibles trabajo para la puesta en valor de espacios». Marquez ha detallado que, tras el escaneo, «lo que tenemos es un mapa de sombras y de ellas, deberemos determinar, cuales son realmente susceptibles de ser restos arqueológicos». Los resultados preliminares, tras los primeros estudios, podrán ver la luz en algo menos de un mes, según ha adelantado Marquez.

Por su parte, concejal de Patrimonio Histórico, Amado Navalón, ha apuntado que «sabemos que en nuestra ciudad hay varios refugios, y tenemos un conocimiento de su ubicación aproximada, pero no así del recorrido de sus túneles».

Restos romanos

También en L'Alfás del Pi se va a usar esta tecnología. Delimitar dónde empieza y termina el asentamiento tardorromano del entorno de la villa romana de l'Albir y conocer más a fondo qué restos arqueológicos esconde el subsuelo de L'Alfàs del Pi es el objetivo. Para ello, la Unidad de Geodetección de Patrimonio Histórico de la Universidad de Cádiz, coordinada por el profesor Lázaro Lagóstena, realizó ayer una prospección geofísica en el espacio de protección arqueológica de la zona costera alfasina, con el fin de avanzar en el conocimiento de zonas de la Villa Romana que todavía permanecen sin excavar y comprobar la posible existencia de restos arqueológicos que puedan conservarse en el subsuelo.

La investigación está impulsada por el área de Cultura y Patrimonio y la Universidad de Alicante (UA) y con ella esperan conseguir información de gran valor científico y permitirá delimitar el asentamiento tardorromano ubicado en el entorno de la Villa Romana de l'Albir. «Es un paso más en la línea que hemos iniciado junto a la Universidad de Alicante para conocer nuestro patrimonio y poner en valor la riqueza cultural y patrimonial de la Villa Romana de l'Albir», según destacó la edil de Cultura y Patrimonio del consistorio alfasino, Mayte García.

La actuación se enmarca en la colaboración con el proyecto Patrimonio Virtual, dirigido por el profesor Jaime Molina Vidal, y ha consistido en la exploración con georradar 3D del espacio de protección arqueológica de l'Albir, en un área delimitada por el camí Vell d'Altea, la línea de costa, la calle Andrómeda y la avenida de l'Albir, que incluye dos yacimientos arqueológicos declarados Bien de Relevancia Local -villa romana y mausoleo-, así como posibles restos aún sin descubrir de necrópolis excavadas en los años 80 y 90.

Según el profesor Molina Vidal, «cuando esta zona se urbanizó, se realizaron excavaciones con metodologías de los años 80 y se recogió material, pero falta documentación. En los lugares en los que estamos prácticamente seguros que no se excavó, la información que quede de la prospección de hoy va a ser fundamental, porque nos dará un registro para poder comprender mejor la historia de esta zona».

Para los trabajos de prospección se utilizó un georradar StreamX, de dos metros de ancho de barrido e impulsado con vehículo motorizado, un equipamiento singular y único en Andalucía que posee gran capacidad de exploración. «Es un georradar que hace exploraciones en tres dimensiones y con bastante calidad de imagen, una tecnología no invasiva de última generación que nos permitirá definir lo mejor posible el patrimonio arqueológico de la zona de l'Albir»,subrayó el profesor Lagóstena. Con ella se podrá conocer la posible existencia de restos sin necesidad de realizar excavaciones. «Sabemos que hay zonas donde quedan enterramientos o ajuares y este tipo de técnica no invasiva nos permite comprender sin excavar, con lo cual supone un gran avance», apuntó Molina Vidal.

Los resultados de esta prospección aportarán una gran cantidad de información sobre el subsuelo y, tras su análisis, supondrán un importante avance en el conocimiento del asentamiento tardorromano de la Villa Romana de l'Albir y de su entorno. Por otro lado, «esta exploración geofísica va a tener una aplicación muy interesante, tanto para las futuras intervenciones como para la gestión urbanística y la puesta en valor del patrimonio», subrayó Mayte García.

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