El Ayuntamiento ha aprobado el convenio regulador de la actividad de la planta de compostaje de residuos urbanos y vertedero gestionada por Vaersa y ubicada en el término municipal, por el que la empresa pagará 40.000 euros más por el canon de la basura correspondiente a 2016, concretamente por las 9.000 toneladas de residuos que el vertedero local recibió de la Vega Baja en ese ejercicio. Una medida que fue adoptada de forma unilateral por la conselleria de Medio Ambiente, a pesar de la oposición del gobierno de Los Verdes.

El convenio establece que la empresa debe abonar a la población 4,5 euros por tonelada de basura de fuera de la zona 8 A-3, a la que pertenece la planta y 1,5 euros por la procedente del plan zonal. Asimismo recoge que la localidad debe abonar a Vaersa unos 500.000 euros por los residuos que generó en 2016 y la empresa deberá aportar unos 600.000 euros, unos 70.000 euros más que en otros ejercicios. Tal y como informó el alcalde de Villena, Javier Esquembre, en 2016 la planta local recibió -tras el cierre de una planta en Crevillente- unas 9.000 toneladas de basura de poblaciones de fuera del plan zonal, una cifra superior a la de otros ejercicios. Por ello el Ayuntamiento recibirá 40.000 euros más de Vaersa.

El alcalde de Villena, Javier Esquembre, ha señalado que espera que a finales de año esté redactado el plan de gestión de la planta de residuos sólidos urbanos que gestiona Vaersa en el término municipal, que deberá ser aprobado por el consorcio de basuras del plan zonal 8 A-3 al que pertenece la localidad y que está presidido por la primera autoridad villenense.

Por otro lado, el equipo de gobierno de Los Verdes, trabaja porque Villena mantenga en el nuevo plan de gestión, el canon compensatorio establecido en 255.000 euros por el hecho de que la planta esté ubicada en el término municipal. «Villena va hacer valer sus derechos porque debe seguir recibiendo este canon», afirmó Esquembre.

Críticas del PP

Los concejales del Partido Popular recordaron que hace siete años, cuando Los Verdes estaban en la oposición y los populares gobernaban la ciudad, exigieron enviar a la planta de residuos a la Policía Local para controlar la procedencia de la basura que se vertía en la misma.

Sin embargo, denuncian que estando el grupo ecologista en el gobierno, paradójicamente, se ha instalado «el inmovilismo en este tema, donde se siguen enterrando miles de toneladas de residuos sin tratamiento y sin proceso de reciclaje. Pedimos, como se hacían antaño, que no se haga una pésima política que sólo beneficia a empresas cercanas a Consell y deseamos que Villena no sea el vertedero de la Comunidad Valenciana», afirman en un comunicado.

Asimismo, lamentan que el mal olor que produce el vertedero siga siendo un problema para los villenenses y Los Verdes no hayan puesto soluciones a esta situación. A este respecto, algunos vecinos denunciaban ayer, en sus redes sociales, el intenso mal olor con el que se habían despertado los vecinos de la ciudad. El portavoz socialista, Fulgencio Cerdán, se hacía eco en su muro de Facebook de esta situación y afirmó: «A la espera del veredicto de los sensores... para que corroboren lo evidente».

De hecho, la concejalía de Medio Ambiente invirtió 25.000 euros en tecnología para detectar el mal olor y en enero de este año se anunció que se iban a ampliar a red de sensores olfatometricos para detectar episodios de mal olor en el término municipal.