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Novelda

El chófer de la exalcaldesa, absuelto de falso testimonio en el caso Cabalgata

Juan Carlos Cremades queda libre de responsabilidad al prescribir el supuesto delito

Juan Carlos Cremades, chófer de la exalcaldesa Milagrosa Martínez.

El que fuera chófer y escolta de la exalcaldesa popular Milagrosa Martínez también ha quedado absuelto de un delito de falso testimonio en relación al caso Cabalgata. El Juzgado de Instrucción Número 2 de Novelda ha declarado prescritos los posibles delitos en los que hubiera podido incurrir el policía local Juan Carlos Cremades. Unos hechos que llevaron a Ricardo Monzó, exconcejal popular de los equipos de gobierno de Novelda y Elda, a presentar una denuncia contra él en octubre de 2013.

La querella fue admitida a trámite un mes más tarde y también incluía a Vicente Serrano, amigo íntimo y único testigo presentado al juicio por el letrado de Cremades. Un asunto que se remonta a 2007 cuando el entonces chófer del alcalde popular Rafael Sáez se apropió de 25.000 euros que debería haber pagado a dos empresas proveedoras de servicios para realizar el desfile de los Reyes Magos. Según indicó entonces Monzó, «Cremades hizo una declaración plagada de mentiras autoexculpatorias y presentó como testigo a su amigo asegurando, sin embargo, no tener ninguna relación con él a pesar de tenerlo empadronado en su casa y como beneficiario de su mutualidad».

Sin embargo, en el reciente auto judicial al que ha tenido acceso este diario, el Ministerio Fiscal advierte de que los hechos están prescritos. «Y ello por cuanto el supuesto falso testigo se presentó en diciembre de 2008 y la querella en octubre de 2013. Esto es, transcurridos casi cinco años desde la comisión de un presunto delito que, además, tiene un plazo de prescripción de tres años».

Hace dos semanas este diario publicó una entrevista con el controvertido Juan Carlos Cremades tras recuperar la libertad una vez cumplidos los dos años de cárcel por el caso Cabalgata. En el mismo artículo se adelantó que la Audiencia también le había absuelto del delito de falsedad documental. Fue acusado de este supuesto al tratar de eludir una multa por exceso de velocidad en el coche oficial dando a la DGT los datos de otra persona sin su consentimiento. Esos hechos ocurrieron doce años atrás por lo que el tribunal también acordó su absolución por prescripción del delito.

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