Restos de fibrocemento y de poda, uralita, enseres domésticos, maderas, plásticos, envases, neumáticos y basuras orgánicas desaparecerán del camino del paraje de La Melva en Elda, que se había convertido en un vertedero incontrolado. Unos 5.300 euros destinará la Dirección de Cambio Climático de la Conselleria de Medio Ambiente en la limpieza de esta vía pecuaria. Tras el envío de la memoria valorada por parte del Ayuntamiento del coste del saneamiento de la zona, la dirección territorial aprobó la actuación, que se espera que comience en breve, aunque todavía no se ha determinado su fecha de inicio.
Gran parte de los materiales que se han arrumbado en el paraje eldense son reciclables (madera, vidrio, materia orgánica, papel y cartón) lo que hará más fácil su eliminación. Sin embargo, uno de los grandes problemas a los que se enfrentarán los equipos de limpieza es la eliminación de la uralita, un material tóxico porque contienen fibra de amianto y que precisa la contratación de una empresa especializada en su retirada, que trasladará este material hasta un punto autorizado en la provincia de Cádiz.
Una vez finalizada la retirada de inertes y su transporte a puntos autorizados de residuos se cerrará el camino como medida para evitar que el vertedero se «reproduzca». En este sentido, la Concejalía de Medio Ambiente mantendrá reuniones con los vecinos con el fin de explicarles la medida de establecer el camino de uso privativo al que únicamente tendrán derecho de paso los propietarios de las fincas de la zona. El programa de la Conselleria de Calidad Ambiental, que acometerá el sellado de gran parte de los vertederos ilegales e incontrolados de la Comunidad Valenciana, se valora en cerca de 30 millones de euros.
Con la aprobación en 2016 del sellado de la escombrera de este camino se adelanta al Plan de Autonómico de Áreas Degradadas de la Comunidad Valenciana. Ahora la Concejalía de Medio Ambiente ha puesto su empeño en la detección e inventariado de pequeños vertederos en el término municipal con el fin de enviar un dossier amplio y detallado para que se puedan integrar en el plan del área de Calidad Ambiental. Así, la concejalía eldense trabaja para eliminar los puntos negros del municipio localizados muchos de ellos en los aledaños del río Vinalopó, vertidos que disparan el riesgo de contaminación por su proximidad al cauce.
Además se ha planteado la necesidad de establecer medidas disuasorias que frenen esta escalada de concentración de basuras en zonas protegidas.
