El petrerense Fernando Casado Carrasco es el ciclista de 63 años de edad que ha fallecido de muerte súbita sobre las diez de la mañana de este viernes cuando circulaba en bicicleta por el kilómetro 20,300 de la carretera 835, el vial que da acceso desde Elda al polígono industrial Les Pedreres de Petrer.

Las dos personas que han sido testigos del suceso han explicado que el fallecido iba solo por el arcén y, de repente, se ha caído al suelo sin ninguna causa aparente. Podría tratarse, por tanto, de un infarto fulminante pero es algo que deberá determinar la autopsia ya que el cadáver ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal de Alicante.

El personal del Samu que ha acudido al lugar ha tratado de reanimarlo sin éxito y también se han desplazado unidades de la Guardia Civil de Tráfico, de la Policía Local de Petrer y de la Policía Nacional. Tan pronto como han conocido la impactante noticia tanto el alcalde de Petrer, Alfonso Lacasa, como el concejal de Seguridad Ciudadana y secretario general del PSOE en la localidad, Fernando Portillo, han acudido a la zona donde también se encontraban familiares del fallecido.

Fernando Casado fue durante muchos años secretario de Acción Sindical y de Organización de CC OO-PV y, en las últimas elecciones municipales, formó parte de la candidatura socialista de Petrer en el puesto número 15. Creó una empresa relacionada con las políticas activas de empleo pero actualmente estaba jubilado, aunque seguía representando al sindicato en el Pacto Territorial por el Empleo del Vinalopó y en otras entidades de ámbito público. Hace tan sólo un mes fue nombrado por el alcalde coordinador-dinamizador del Consejo Social de la Agencia de Desarrollo Local de Petrer y el pasado martes mantuvo su última reunión de trabajo. Hoy mismo, a las siete y media de la mañana, ha contactado con David Morcillo, el secretario del grupo municipal socialista, para abordar varias cuestiones antes de coger la bicicleta para recorrer una de las rutas que realizaba habitualmente.

Era aficionado al ciclismo y no sufría ninguna afección cardíaca así que su repentina muerte ha dejado en «sock» a los trabajadores y políticos del Consistorio, y especialmente al equipo de gobierno de PSOE, Compromís y EU con los que mantenía una estrecha relación. «Esto ha sido un duro mazazo que nos ha dejado conmocionados», ha señalado a este diario Fernando Portillo.