Fue abandonado en la basura gravemente enfermo al no poder ser vendido por 20 euros en el mercadillo de Salinas. Desnutrido, deshidratado, inmóvil y sin apenas visión estaba predestinado a morir. Pero una colaboradora de la Asociación de Animales y Plantas «Los Chiquitines» de Salinas lo encontró y entregó a la presidenta Cristina Barceló. Fue ella quien se llevó a casa al yorsai de cinco años y le prestó los primeros cuidados hasta que Beni -que es el nombre que le han dado- fue dado en acogida a Eva Peinado, que lo tiene en su casa de Petrer «con todas las atenciones, los mimos y el cariño que necesita tras la traumática experiencia sufrida».
La historia de Beni se ha difundido a través de las redes sociales y ha conmovido a los amantes de los animales del Medio Vinalopó. Tanto es así que la Asociación de Amigos del Perro de Petrer y los responsables de la tienda de mascotas La Galga han organizado una modesta rifa. Los fondos se destinarán al pago de los servicios del veterinario que está atendiendo al perrito, que también padece leishmaniosis canina, una enfermedad crónica muy grave que es trasmitida por un mosquito.
Beni carece de chip, pero podría haber sido robado. Por eso quien lo trataba de vender el domingo en el rastro de Salinas, con un elegante abrigo naranja, lo abandonó en los contenedores al no conseguir ningún comprador. De ahí que su foto esté siendo difundida para tratar de localizar a sus dueños.
«Beni se libró de la muerte pero desgraciadamente decenas de perros son arrojados a los contenedores y mueren triturados en los camiones de basura», advierte Cristina Barceló reclamando «más humanidad a los humanos».
