La concejala de Desarrollo Económico de Villena, Esther Esquembre, avanzó ayer que el próximo octubre estará redactado un plan de pagos para solventar la irregular situación que sufre el mercadillo, que cada jueves se instala en el recinto ferial en los aledaños del Mercado de Abastos.

Sin señalar a ningún técnico ni a anteriores responsables políticos del área, la edil Verde informó que los recibos que no se han emitido por parte del Ayuntamiento para pasar al cobro a los dueños de los puestos en el mercado ambulante superan los 240.000 euros. Asimismo, la edil informó de que la pasada semana se ordenó la emisión de los recibos del primer semestre de 2014.

Esquembre puntualizó que existe un 25% de morosidad en el impago de las tasas municipales por instalar un puesto ambulante pero el principal problema es que no se pasaron al cobro los recibos pertinentes. La edil aludió al informe emitido por el departamento de Rentas del Ayuntamiento en el que se establece que el problema viene de lejos, concretamente de 2008. Asimismo, Esquembre subrayó que no es un problema de un gestor sino de «unas formas de trabajar que son heredadas y que han creado un problema».

Esquembre exculpó de responsabilidad al alcalde, Javier Esquembre, así como al Grupo Verde, ya que según afirmó «no ha tenido gestión sobre el mercado».

Las últimas palabras de la concejala desataron el malestar entre las filas de la oposición. El socialista Fulgencio Cerdán argumentó que «alejar la responsabilidad del alcalde cuando fue la máxima autoridad de la ciudad en la anterior legislatura y además concejal de Hacienda, que es y ha sido el responsable de los cobros en este Ayuntamiento, es como poco, intentar confundir a la ciudadanía y protegerlo de una mala gestión». Y además destacó que la responsabilidad del mercado desde julio de 2011 hasta agosto de 2013 fue de Virtudes Hernández, de Los Verdes.