Tanto los agricultores de la uva de mesa como los de vinificación coinciden en que «es demasiado pronto para saber qué sucederá con las uvas». En el caso de la de mesa se inicia la recogida de la variedad Victoria en a finales de julio y las últimas estarán en las cepas hasta el mes de diciembre. Por ello, el presidente del Consejo Regulador de la Uva de Mesa, José Bernabeu, destacó que «son muchos meses y la climatología manda en la agricultura». Por el contrario en el caso de las destinada a elaborar tanto vino, su recogida comenzará en los últimos días de agosto y principios de septiembre. Desde la Cooperativa de Nuestra Señora de la Virtudes, aún siendo cautos, afirmaron que «si la climatología sigue a este ritmo será un buen año». M. Pardo
