José María Amat Amer, que fue director del Museo del Calzado de Elda, presenta hoy su libro «Museo del Calzado. Orígenes y consolidación (1986-2005)». El autor de la publicación nació en Elda en 1941, fue el fundador de la colección y su director desde su fundación en 1992 hasta finales de 2005.
¿El libro que hoy presenta es la publicación de sus memorias al frente del museo?
En parte sí. Recoge el periodo desde que se fundó hasta que yo finalicé mi trabajo como director.
¿Porqué escribir un libro sobre el Museo del Calzado?
En él he querido agradecer a las cientos de personas que han hecho posible la fundación y consolidación del Museo del Calzado. Para que fuera posible se aunaron muchas voluntades. Si vale el símil, yo era el director, pero un director sin músicos no es nada. He querido que todos aquellos que colaboraron se vieran reflejados en estas páginas.
Y es un legado para generaciones futuras. ...
Esta es otra de las finalidades. Las nuevas generaciones conocerán a Luis García Berlanga por su vinculación con el cine, pero con este libro sabrán, además, su relación fundamental con la creación del Museo eldense. También será una herramienta de trabajo para los patronos, que se eligen cada cuatro años. Ellos conocen el museo pero no sus entresijos. Así, podrán conocerlo y amarlo desde el principio.
De todos sus recuerdos ¿Con cúal se queda?
No puedo decantarme por ninguno. Hasta la cosa más insignificante tiene un gran valor. Detrás de cada objeto hay una historia. Muchos de ellos pertenecieron a familias que los donaron al museo para que permaneciera el recuerdo de sus padres. Por su puesto que hay cosas irrepetibles como los zapatos del Papa Juan XXIII, que utilizó el día de su proclamación. Ahora son una reliquia porque es santo.
¿Y qué vivencia guarda en su corazón?
Muchas, como cuando un zapatero de Palencia nos entregó toda su colección. Detrás de muchas donaciones hay grandes historias que reflejo en el libro.
¿Hablará también de las Mejor Calzadas?¿De alguna de ellas en especial?
Sin desmerecer a las demás me quedo con dos. Una de ellas es Concha Velasco. Su presencia fue inolvidable. La otra es la baronesa Thyssen que siempre habló con especial sensibilidad del Museo y que se esforzó en unirnos con Manolo Blahnik, aunque finalmente no se consiguió.
La recaudación de la venta va destinada a la conservación del Museo del Calzado¿Vive éste una mala situación económica?
Vive la misma situación de crisis que el resto del país. Muchos de los estamentos que colaboraban económicamente han desaparecido.Su máximo valedor es el Ayuntamiento. No está en bancarrota porque el Ayuntamiento no lo va a permitir. Pero no estamos para ir tirando cohetes.
¿Como ve su futuro?
Mientras el patronato esté compuesto por eldenses y permanezca en Elda, su futuro está asegurado. Es un elemento muy importante para la ciudad.
