Hoy llegan, por fin, a las comarcas del Medio y Baix Vinalopó las aguas del trasvase del Júcar que evitarán la muerte de 20.000 hectáreas de cultivos en situación crítica a consecuencia de la mayor sequía que sufre la provincia de Alicante en los últimos 150 años. Del riego de auxilio se van a beneficiar 15.000 agricultores de ambas comarcas que, desde hoy y hasta finales de septiembre, se repartirán los 15 hm3 de agua procedentes del Azud de la Marquesa de Cullera, en el curso bajo del Júcar.
Por eso los caudales no podrán ser utilizados para consumo humano ni para el riego de hortalizas pero, al menos, serán esenciales para salvar las plantaciones de cultivos leñosos, fundamentalmente de vid, olivo y almendro, que están al límite de la supervivencia tras nueve meses sin lluvia.
El acto de apertura de la conducción se realizará hoy, a las once de la mañana, en el embalse de La Cuesta de Villena y al mismo está previsto que acudan el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, y el conseller de Agricultura, José Císcar, además de los alcaldes y concejales de los municipios de la zona y los dirigentes de las comunidades de regantes que van a recibir los aportes hídricos.
Una vez que Fabra y Císcar procedan a abrir la válvula de regulación del postrasvase del Júcar, las aguas almacenadas en el embalse de San Diego de Villena tras el primer envío de urgencia serán impulsadas hasta el embalse de El Toscar de Monóvar y, desde allí, comenzarán a repartirse, en función de sus necesidades, a las comunidades de regantes Virgen de las Nieves, Salinas, Monóvar, Hondón de las Nieves, Virgen de la Plaza, La Romana, Galería de los Suizos y las SAT Percamp de Monóvar y San Enrique de Elche.
Todas ellas recibirán, antes de que finalice este mes, 1.957.686 metros cúbicos de agua. En agosto la cantidad se reducirá a 1.870.460 metros cúbicos y en septiembre se situará en 1.327.813 metros cúbicos.
Y de todos los municipios Aspe, Hondón de las Nieves y Hondón de los Frailes van a ser los más beneficiados del Alto y Medio Vinalopó por un riego de emergencia que es «vital» para la supervivencia de sus plantaciones -porque las cosechas ya se dan por perdidas- dado que todos los recursos hídricos de los que disponían para riego se iban a agotar en el plazo máximo de una semana.
Una escasez agudizada por la cruel sequía de este año que había llevado a los agricultores de la zona a tener que pagar el agua a 0,60 céntimos el metro cúbico, cuando a partir de ahora, con la llegada del envío del Azud de la Marquesa lo van a hacer a poco más de 0,20 céntimos el metro cúbico.
Además de ser los tres municipios de la comarca que más necesitados estaban de agua, que más pagaban por la misma y que más caudales van a recibir, con el nuevo aporte hídrico se van a garantizar reservas suficientes para poder mantener sus plantaciones vivas hasta noviembre. Una medida que los agricultores han recibido con enorme alivio.
El PSOE reclama «estabilidad»
El máximo responsable del PSOE en Alicante, diputado y edil de Aspe, David Cerdán, celebró ayer la llegada del agua del Júcar al Medio y Baix Vinalopó pero insistió en la necesidad de «dar estabilidad al trasvase para evitar incertidumbres entre los agricultores ante periodos de sequía». Cerdán no se opone a una segunda toma desde el Júcar pero considera «urgente» acelerar la reparación del embalse de San Diego para facilitar los aportes regulares de agua del Júcar.
