El empresario de calzado eldense Juan Navarro Busquier, fundador de la firma zapatera «Kurhapies», y padre de la diseñadora Sara Navarro, falleció en la madrugada del domingo al lunes cuando contaba con 84 años de edad. Navarro ha sido todo un referente nacional en el mundo del calzado y un símbolo para la ciudad de Elda, donde ha desarrollado su labor profesional prácticamente hasta el último momento de su vida. Aquejado por problemas de salud, aparentemente sin excesiva gravedad, Navarro falleció de forma repentina en el Hospital General de Elda donde estuvo ingresado durante la última semana.
Embajador de su ciudad natal, Elda, y del calzado español en general, Navarro se ha distinguido a lo largo de los años por su faceta empresarial como visionario en su apuesta por la creatividad; por la rigurosidad en la producción, confeccionando artículos de máxima calidad y por la comercialización y exportación de sus zapatos a todo el mundo. Pero a la vez que fue cosechando éxitos profesionales, ejerció su «eldensismo» incondicional en cualquiera de los acontecimientos, premios y reconocimientos que ha recibido a lo largo de su larga trayectoria profesional.
La ciudad amaneció ayer vestida de luto por la pérdida de uno de sus hombres más populares y carismáticos que hizo de su empresa todo un modelo a seguir, tanto para trabajadores, como para empresarios del sector.
Su vínculo con Elda ha sido fue siempre importante en su faceta empresarial, dado que la sede central de sus oficinas y fábricas ha permanecido de forma permanente en su ciudad natal, desde sus inicios en 1946. Cabe reseñar que la edad no hizo mella en su ilusión por la industria. Y su carácter emprendedor llevó a Navarro ha reiniciar su andadura profesional ya cumplidos los 83 años. El pasado año retomó su actividad empresarial y creativa elaborando tres nuevas líneas de la firma insignia del empresario, «Kurhapies», una de ellas diseñada por él mismo.
Otra de sus pasiones junto a su familia, sus padres, esposa e hijos, ha sido siempre su plantilla de trabajadores cuyo reconocimiento siempre estuvo en boca del empresario.
Una de sus últimas apariciones en un acontecimiento público fue hace dos años pregonando las Fiestas Mayores de 2012 con un sentido pregón desde el balcón del Ayuntamiento. Su interés por Elda también le llevó a hacer una breve incursión en política, fundando el partido político Unión para el Progreso de Elda, UPE, formación con la que concurrió como cabeza de lista a las elecciones municipales de 1999, obteniendo representación en el Ayuntamiento como concejal.
El conjunto del empresariado y los representantes de las instituciones eldenses lamentaron ayer la pérdida de este «filántropo», dado que a su trayectoria como fabricante siempre estuvo ligado su fomento e interés por la cultura con la creación de un museo, ayer capilla ardiente del empresario, y también como mecenas de un premio narrativo nacional, entre otras iniciativas.
