Los vecinos de Monforte del Cid acuden cada mañana a su cita con «la paloma» y «el canario». Durante las fiestas del barrio de San Roque, los ciudadanos salen a las calles para tomar estas refrescantes bebidas que mezclan anís, agua, hielo y un chorro de jarabe de limón.

Del 9 al 16 de agosto, los monfertinos celebran las famosas sesiones de canario y paloma en honor a San Roque. En primer lugar, se mezcla anís con agua fría y hielo para crear la «paloma» y, los que lo prefieren, añaden un poco de jarabe de limón a esta combinacón hasta transformarla en el «canario».

Gente de municipios cercanos como Elda, Aspe y Novelda también se desplazan al barrio monfortino para probar esta explosiva bebida. A partir de la 13 horas y durante ocho días, los ciudadanos olvidan el calor y se reúnen en las plazas para para brindar y divertirse.

Una bebida con tradición

La historia de esta composición se remonta al siglo XIX. Los vecinos, que año tras año han seguido con esta tradición, han convertido «la paloma y el canario» en la seña de identidad de las celebraciones de San Roque.

La alcaldesa de la localidad, Antonia Cervera, tampoco se pierde estas jornadas. «Todos los vecinos de Monforte, no solo los del barrio, se vuelcan con estas festividades y se mantienen fieles a esta bebida característica», apunta Cervera.

Tras una semana repleta de actos, las fiestas de San Roque llegan a su fin este viernes 16 con la procesión del Santo. No obstante, los amantes de «la paloma y el canario» todavía tienen dos días para disfrutar de esta típica mezcla.