El número de accidentes de tráfico con daños materiales registrados en el casco urbano de Aspe se ha reducido un 65% en 2012 sobre el año anterior, pasando de 125 a 44 siniestros y requiriéndose en todos ellos la intervención de la Policía Local. Es la segunda bajada consecutiva ya que en 2011 este capítulo también experimentó una caída del 13% respecto a 2010.

Las razones concretas que explican este curioso fenómeno, especialmente acentuado en 2012, se desconocen aunque pueden haber influido diferentes factores entre los que no figuran, desde luego, las campañas municipales de seguridad vial porque, sencillamente, en el último año no se ha llevado a cabo ninguna. Lo que sí se ha notado es más presencia policial por los barrios con patrullas a pie, más controles de alcoholemia sobre todo los fines de semana y menos tráfico rodado por el casco urbano y, por pura lógica, cuantos menos vehículos circulan por las calles menos probabilidad hay de que se produzcan accidentes.

El concejal de Seguridad y Tráfico de Aspe, David Cerdán, cree que los efectos de la crisis están detrás de la caída de la siniestralidad vial. "El combustible está muy caro así que la gente prefiere desplazarse a pie por la ciudad y, además, hay muchos parados que ya no tienen que hacer uso del coche para desplazarse a las zonas industriales". En cualquier caso Cerdán también cree que ha mejorado el comportamiento de los conductores de Aspe y él lo agradece.

Según la memoria anual de la Policía Local, en 2012 se realizaron 29 controles de alcoholemia, muchos de ellos conjuntamente con la Guardia Civil. "Estos dispositivos pretenden reducir al mínimo el riesgo de accidentes, especialmente los fines de semana y entre los jóvenes, y ha sido una herramienta más para combatir el botellón en nuestro municipio", ha señalado el edil del área.

En 2012 se interpusieron 144 denuncias por consumo de alcohol en la vía publica, se realizaron seis detenciones y se recuperaron seis vehículos robados. "Podemos estar satisfechos de la labor de la Policía Local de Aspe, de su profesionalidad y su capacidad de trabajo en materia de seguridad ciudadana y en defensa de la convivencia local", concluye Cerdán.