Un curioso fenómeno que tiene que ver con la vida y la muerte se viene repitiendo con cierta frecuencia en la villa de Sax. No se sabe desde cuando ocurre pero en los últimos años cada vez son más las personas que lo comentan, aludiendo al misterio o la casualidad que encierra este inusual hecho.

Se da la extraña circunstancia de que cuando un vecino o vecina de la localidad fallece, también muere otro vecino o vecina en un intervalo de 24 o 48 horas a lo sumo. Luego se produce un tiempo de espera, de varios días o incluso de semanas, y el fenómeno vuelve a repetirse. Obviamente la secuencia no se produce con una exactitud matemática. En ocasiones hay fallecimientos aislados y en otras el número de óbitos son tres y no dos, pero sí se ha podido comprobar que el porcentaje de coincidencia de dos fallecimientos en un periodo de uno o dos días es ciertamente elevado.

Este diario ha tenido acceso al listado de defunciones registrados en Sax en los tres últimos años. Tras analizar todos los datos las conclusiones que pueden extraerse apuntan a que, efectivamente, la proporción es alta y al situarse entre el 57% y el 74%.

En el año 2010 fallecieron en la localidad 91 personas. De todas ellas 57 lo hicieron en un intervalo de 24 horas y 68 encontraron la muerte en un periodo de 48 horas. Es decir, el 74% de las defunciones se sucedieron dentro de los dos días siguientes de producirse la primera. En 2011 se enterraron en el cementerio municipal de Sax 55 personas de las que 26 murieron en un intervalo de 24 horas y 32 en 48 horas. En este caso el porcentaje alcanza el 58% mientras que en lo que va de 2012 se sitúa en el 57%, tras el fallecimiento de 51 personas de las que 25 lo han hecho en 24 horas y 29 en 48 horas. Y esta misma semana, sin ir más lejos, se ha vuelto repetir el proceso con tres nuevos casos hasta el día de ayer.

Entre los fallecidos no parece existir vínculo o relación alguna. El único nexo que les une es que todos ellos tenían fijada su residencia en la villa sajeña. Hay otras localidades del Alto y Medio Vinalopó con un padrón de población similar al de Sax, que ronda actualmente los 10.000 habitantes, que sin embargo no sufren "la llamada del más allá" tal y como algunos han comenzado a denominar este raro fenómeno mortuorio que los profesionales de los servicios funerarios conocen muy bien, y desde hace ya muchos años.