El villenense Julio Guillén Domene cederá hoy al Ayuntamiento de Villena el reloj de sala de uno de los talleres de la afamada escuela villenense de relojería del siglo XVIII.

El acto de cesión tendrá lugar a las 20.30 horas en el salón de actos de la Casa de la Cultura, con la presencia del alcalde, Javier Esquembe, la edil de Cultura, Isabel Micó, la directora del Museo Arqueológico José María Soler y un experto y estudioso relojero, Jesús García Martínez.

Julio Guillén indicó que cuando adquirió el reloj en junio de este año, "se trasladó directamente desde Valencia, donde se encontraba, hasta el Museo".

No quiso entrar en los términos del convenio de cesión del reloj, indicando que el mejor lugar para esta obra es el Museo Arqueológico de Villena.

La directora del Museo, Laura Hernández, insistió en que el reloj de sala es una pieza única -solamente se conoce la existencia de cuatro relojes más de la escuela de Villena- que permitirá, además, indagar en una parte de la historia local poco documentada.

En el siglo XVIII y hasta el primer tercio del siglo XIX Villena contaba con una escuela de relojeros que contaba con gran fama y prestigio. Dos eran los talleres donde se desarrollaba esta actividad, uno ubicado en la actual calle El Hilo y otro en La Tercia. Uno estaba regentado por Pedro Navarro y el otro por López Olivares, éste último al contrario que Pedro Navarro, nunca firmaba sus trabajos.

Las características que diferenciaban a los relojes de Villena era la existencia de autómatas, siendo el principal elemento la figura del Orejón.