El sindicato La Unió de Llauradors ha puesto de manifiesto la preocupación que los agricultores vienen manifestando desde hace décadas, por la falta de medidas que garanticen la recogida y el reciclaje del papel que se utiliza para embolsar la uva de mesa del Vinalopó. Cada campaña se consumen entre 700 y 1.000 toneladas de bolsas de papel únicamente en la comarca del Medio Vinalopó y por ello La Unió considera necesaria la elaboración de un proyecto de I+D+i que ayude a determinar el uso que se pueda dar a este residuo. Algo que, según señalaba ayer José Antonio Rico, secretario comarcal de La Unió, podría generar riqueza, puestos de trabajo y reducir el impacto medioambiental que las bolsas de la uva producen al ser abandonadas o quemadas en el campo.

Hasta ahora los profesionales del sector han llegado a acuerdos puntuales con sus respectivos ayuntamientos para que se hagan cargo de recoger las balas de papel. Pero este método presenta inconvenientes por las reticencias que demuestran las empresas de recogida de basuras debido a que los ayuntamiento no quieren asumir el sobrecoste de las tareas.

Dice Rico que "la Conselleria de Agricultura, que es la competente en la materia y debe tomar por tanto medidas, nunca ha mostrado interés en solucionar este problema de impacto medioambiental. Por ello, nuestra organización considera de vital importancia encontrar una alternativa para la utilización de este papel con la implicación y el compromiso de todos", subraya.

Además, La Unió cree que las bolsas de papel pueden convertirse en una "oportunidad de negocio" puesto que podrían ser empleadas para elaborar otros productos. De hecho, por primera vez el año pasado una empresa se hizo cargo del papel y, mezclándolo con cartón, consiguió la elaboración de un cartón de calidad que luego vendió en el mercado chino. No obstante, el sindicato reconoce que para ello se exigen unas condiciones que no están al alcance de los pequeños agricultores del Vinalopó.