Los vecinos del edificio Lucía, ubicado de la avenida de Ronda en Elda, afirman estar hartos de los "okupas" que se han instalado en los bajos de su edificio, de uso comercial pero que en la actualidad se encuentran en desuso y en completo abandono por parte de la constructora. Esta dejadez es aprovechada por los "okupas" para instalarse a sus anchas y hacer del solar su propio hogar.

En el interior de los bajos los escombros de las obras se acumulan con los restos de comida y enseres de los habitantes de los bajos abandonados. Según afirman los vecinos, la acumulación de basura cada día va a más. Y es que, como afirma Fini Martínez, vecina del inmueble, la situación cada día es peor: "Antes, cuando los okupas rompían los ladrillos y se instalaban en los bajos, la constructora, tras las quejas de los vecinos, tapiaba los ventanales por donde accedían y éstos continuaban así durante semanas. Sin embargo ahora la situación es peor y hay ocasiones en que no pasa ni una semana y los accesos vuelven a estar destrozados y los okupas otra vez en el interior. Siempre es lo mismo".

Rejas en la puerta

La situación de inseguridad que sufren estos vecinos del edificio Lucía les ha llevado a instalar una reja en la puerta de su vivienda ante un posible acto vandálico como el que ya ocurrió en la oficina ubicada en los bajos y que sirve para atender a los posibles clientes. Los vándalos casi rompen a pedradas el cristal de la puerta de acceso a la oficina.

La inseguridad se incrementa con la llegada de la noche. "En ocasiones están fuera y como para acceder a mi casa tengo que pasar frente a ellos a veces paso miedo", afirma Melania García, otra vecina. Los vecinos, cansados ya de la situación, reclaman una solución urgente y viable que garantice la seguridad de la zona porque aunque ahora la entrada esté tapiada aseguran que de aquí a unos días los okupas volverán a estar dentro.