La propietaria de un turismo aparcado en el cementerio de Petrer sufrió un robo el martes cuando se encontraba en el interior del camposanto asistiendo a un entierro. El suceso se produjo poco después de las 11 horas. El ladrón rompió la ventanilla trasera derecha sustrayendo diversos objetos de su interior así como la documentación personal de la dueña. A continuación se dio a la fuga sin que las patrullas de la Policía Local que dieron instantes después una batida por la zona pudieran localizarlo.

No es la primera vez que ocurren este tipo de sucesos en el cementerio de Petrer. También en la vecina localidad de Sax se produjeron durante el pasado invierno varios robos de idénticas características. Delitos que son especialmente execrables por cuanto los ladrones se aprovechan del momento de duelo y confusión que sufren las víctimas, así como de lo alejados y poco transitados lugares que ocupan los cementerios para obtener un botín seguro, sin ser descubiertos y garantizándose una fácil huida.