Un gasto de más de 6.000 euros al mes por una residencia para discapacitados que permanece cerrada pese a cumplir todos los requisitos. Éste es el desembolso que tiene que realizar la Federación de Asociación de Discapacitados Físicos de la provincia de Alicante (Cocemfe) para mantener el centro de Petrer, terminado hace más de un año, debido a los impagos del Consell. Una situación que ha situado a la asociación en una situación límite y que les ha llevado a iniciar una campaña de recaudación de fondos destinados a financiar los gastos que les supone la residencia. Algo que no es sencillo, ya que como afirma su presidente, Antonio Ruescas, "son malos tiempos y hay muchas asociaciones que pidiendo un poco de solidaridad".

Estos gastos mensuales se deben a la exigencia que, en su momento, les pidió la Conselleria de Bienestar Social para sufragar el funcionamiento del centro. Una homologación que consistió en la instalación de cámaras de seguridad, alta de electricidad, energía, seguro... y que hasta el momento no ha servido de nada, ya que esta residencia de Petrer sigue cerrada.

A pesar del tiempo de retraso en la apertura del centro, desde la Conselleria aseguran que la residencia estará operativa en poco tiempo. Según explica el presidente de Cocemfe, el conseller de Bienestar Social, Jorge Cabré, les prometió que en mayo la residencia estará funcionando. Una declaración ante la que Ruesca se muestra "un poco escéptico". No obstante, afirma que es "cierto es que nos han confirmado que hay una partida de 400.000 ? en los presupuestos de la Generalitat Valenciana destinada a la residencia y centro de día de Petrer".

Este anuncio da vida a una de las grandes demandas de Cocemfe, pero ahora les asusta un poco. El presidente indica que "por experiencia propia y por lo que estamos observando con otras asociaciones llevar adelante una infraestructura de este tipo y esperar que lleguen las ayudas te pone en una situación complicada".

Según señala, no será un problema llenar la residencia, que empezará su andadura poco a poco hasta que a finales de este año esté a un 80%. Solo las solicitudes que la conselleria de Bienestar Social tiene para ocupar una plaza en ella sobrepasan las cien, aunque sólo haya disponibilidad para 40.

Ruescas recuerda que la residencia se proyectó para un perfil de usuario muy concreto: personas de edades medianas con una gran dependencia y con un entorno familiara desprotegido. Estos enfermos ocupan, en la actualidad, plazas en geriátricos y en centros de alzheimer. "Están bien atendidos por los profesionales, pero no es su entorno natural" puntualiza Ruesca añadiendo que "no es normal que una persona de 40 años, con una gran discapacidad por un accidente laboral o de tráfico tenga que vivir toda su vida rodeado de ancianos. Necesita otro entorno".

El centro, con capacidad para 40 plazas de residencia y otras 30 plazas de centro día, es un edificio completamente adaptado, incorporando los últimos avances en domótica y nuevas técnicas de rehabilitación.

El nuevo proyecto es una red de viviendas

El primer objetivo es abrir la residencia pero después de él viene otro, menos ambicioso pero no menos necesario: un complejo de viviendas tuteladas. Cocemfe quiere utilizar los servicios de la residencia, catering, lavandería, limpieza para posibilitar una red de viviendas tuteladas. En ellas vivirán personas con discapcidades más leves y perfiles diferentes que puedan complementarse y ayudarse. Serán autónomos, pero contarán con la ayuda de terapeutas.

Para este complejo de viviendas, la directiva de la federación está negociando con entidades bancarias. Quieren determinar qué posibilidades hay y los inmuebles que éstas tienen en propiedad por embargos o que se las cedan o las donen. Ruesca indica la residencia está ubicada en Petrer pero es un proyecto de toda la provincia. Sin embargo, tanto el centro de día como las viviendas tutelas son proyectos que directamente benefician a Petrer y a las poblaciones cercanas.