Responde al nombre de Sebastian, tiene 21 años de edad, mide 1,80 de estatura, su complexión es delgada, su nacionalidad holandesa, no sabe apenas hablar español ni inglés y necesita tomar medicación de forma urgente. Lleva desaparecido desde el pasado domingo 26 de febrero tras abandonar la casa tutelada del Proyecto "Adiós Holanda" que está ubicada en la partida rural de La Ofra de Aspe. Allí se encontraba residiendo, desde hacía ocho meses, bajo la custodia del psicoterapeuta holandés Juan Baptista y su familia.

Fue el propio responsable de este centro destinado a atender a menores holandeses con problemas de conducta e inadaptación social quien denunció la desaparición de Sebastian el pasado lunes 27 de febrero, un día después de que abandonara el centro sin dar a conocer a nadie sus intenciones. Desde entonces la Guardia Civil lo está buscando pero, hasta la tarde de ayer, el operativo desplegado no había obtenido ningún resultado satisfactorio.

Sebastian residía en la casa de "Adiós Holanda" junto a otros nueve menores y adolescentes de entre 11 y 21 años de edad. Todos ellos han sido enviados por las autoridades judiciales holandesas a la casa tutelada de Aspe para ser sometidos a un tratamiento psicológico y terapéutico especializado, que en algunos casos se prolonga varios años, con el fin de reconducir sus pautas de comportamiento con el objetivo de alejarlos de un ambiente de delincuencia, drogadicción o marginalidad.

Búsqueda angustiosa

Pero al joven desaparecido no sólo lo busca la Guardia Civil. A las tareas destinadas a su localización se ha sumado la comunidad educativa de "Adiós Holanda" con el director del centro Juan Baptista al frente, así como voluntarios y vecinos de Aspe. Tras una semana de búsqueda angustiosa sin ninguna noticia positiva ni indicio alguno de Sebastian se llegó a pensar en lo peor. Pero anoche se consiguió una "buena" pista que los agentes de la Guardia Civil asignados al caso están siguiendo de forma discreta y minuciosa para tratar de dar con el paradero del joven. En cualquier caso, Juan Baptista ha pedido a través de este diario la máxima colaboración ciudadana para que cualquier persona que lo haya visto, que sepa algo de él o que tenga algún tipo de información al respecto se ponga en contacto a la mayor brevedad posible con la Guardia Civil. "Es muy importante encontrarlo de forma urgente porque está sometido a tratamiento médico y si no toma su dosis de medicina diaria podría desestabilizarse y enfermar", ha señalado el responsable del Proyecto "Adiós Holanda". Una organización que se implantó hace cinco años en el paraje aspense de La Ofra con el objetivo de acoger a jóvenes problemáticos, de familias desestructuradas o procedentes de ambientes delictivos. No es el caso de Sebastian, que no es violento ni tiene ninguna causa penal pendiente aunque sí arrastra problemas de inadaptación social.

La Embajada de Holanda en España está siguiendo el caso con especial atención y los informativos de las principales cadenas televisivas de los Países Bajos ya se han hecho eco de la noticia.