El estado de abandono y ruina que presenta la zanja de hielo de la Finca Lacy de Elda ha llevado a esta singular construcción del siglo XVIII a una situación de deterioro que parece no tener ya marcha atrás. Y ello pese a ser el único nevero de la Comunidad Valenciana de planta rectangular, estar catalogado como bien de interés etnológico y gozar, desde los años 90, de la protección legal de la propia Generalitat Valenciana por tratarse de un relevante vestigio del patrimonio histórico e industrial de la Elda de hace más de 300 años.

En este pozo subterráneo de 7,10 metros de ancho, 16,5 de largo y 2,55 de profundidad se almacenaban y compactaban hasta 8.000 arrobas de nieve -92.000 kilogramos en la medida castellana- que luego se transportaban en carros durante la época estival para ser vendidas en mercados y heladerías.

La Asociación de Amigos del Patrimonio Histórico, Cultural y Medioambiental de Elda (Mosaico) lleva 17 años reclamando la urgente restauración de la zanja de hielo antes de que, lo que todavía queda en pie de su endeble estructura, termine colapsando. Algo que ocurrirá de un momento a otro en un proceso de destrucción que las violentas lluvias de primavera y verano podrían acelerar.

Cabe recordar que hace dos años, en septiembre de 2009, este diario se hacía eco de las últimas reivindicaciones lanzadas por Mosaico a la Conselleria de Cultura y a la concejalía de Patrimonio Histórico de Elda con el fin de que se dispusieran fondos públicos, también de forma urgente, para acabar con la desoladora estampa que presenta el peculiar nevero. Una imagen llena de escombros, vegetación y suciedad en un alejado descampado del polígono industrial Finca Lacy y con la Ronda Sur a escasos metros. Pero a la situación de ruina se añade la situación de peligro por la existencia, junto al nevero, de un enorme hoyo de unos seis metros de profundidad, cercado únicamente por cuatro piquetas y una deteriorada cinta de plástico.

Los 22 millones de los planes E y Confianza pasaron de largo

Mosaico lamenta que ni un solo euro de los 22 millones que han llegado a Elda a lo largo de esta legislatura -procedentes del Plan Confianza de la Generalitat Valenciana y de los dos Plan E del Gobierno central- haya ido destinado a la restauración y puesta en valor de la zanja de hielo de la Finca Lacy. Cuando se supo que el Ayuntamiento recibiría una subvención de casi 10 millones de euros del primer Plan E, Mosaico pidió al equipo de gobierno popular de Adela Pedrosa que destinará parte de esos fondos a la rehabilitación del Casco Antiguo, a la adecuación y limpieza del castillo y a la recuperación del nevero de la Finca Lacy. Sin embargo, ninguna de las tres solicitudes han sido atendidas. De hecho, ni siquiera fueron tenidas en cuenta. Algo que, en virtud de los antecedentes, no resulta extraño. Ni la Conselleria de Cultura incluyó en 2008 a la zanja de hielo en su línea de ayudas a la recuperación del patrimonio etnológico ni el Ayuntamiento lo volvió a pedir en 2009. Al concejal de Patrimonio José Mateos no pareció importarle mucho el informe del Museo Arqueológico Municipal aconsejando la inmediata intervención.