Un novedoso y caro sistema que emite ondas sonoras por inducción magnética y se acaba de instalar en la estación del ferrocarril de Elda-Petrer ha mejorado, enormemente, la comunicación entre las personas que padecen cualquier discapacidad auditiva y los empleados encargados de vender los billetes del tren en ventanilla.

El dispositivo lo ha adquirido e instalado la Asociación de Minusválidos Físicos Intercomarcal (Amfi) con el objetivo de romper una nueva barrera en la estación del tren de Elda-Petrer. Pero en esta ocasión una barrera que no es arquitectónica sino sensorial.

El funcionamiento es bien sencillo. Toda persona provista de un sonotone sólo tiene que activar la función "T" del audífono cuando se encuentra junto a la ventanilla. La voz del empleado situado en el interior de la cabina es captada por un pequeño altavoz y se transforma en ondas que sólo son captadas por el portador del audífono. De este modo no necesita leer los labios de su interlocutor y puede seguir perfectamente la conversación aunque los niveles de ruido exterior, por la llegada o el paso de un tren en ese momento por ejemplo, sean muy elevados.

Un cartel azul y blanco con una gran oreja y la letra "T" informa al usuario de la posibilidad de hacer uso de este pionero sistema, que se ha comenzado a aplicar con "gran éxito" tal y como varias personas sordas han manifestado a este diario.

"Es un paso más. Primero se consiguió eliminar las barreras arquitectónicas en la estación, luego se facilitó el tránsito de invidentes, a continuación Amfi logró hacerse cargo de la venta de billetes, posteriormente Atendo Dependencia comenzó a ayudar a las personas con movilidad limitada a subir y bajar de los trenes y ahora ha llegado el bucle magnético para los discapacitados sensoriales", recordó ayer el presidente y fundador de Amfi, Andrés Molina, quien ya tiene en mente instalar este mismo dispositivo en los parking del Mercado Central y la Gran Avenida de Elda donde trabaja la asociación.