El presidente de la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos de Alzheimer de Elda, Petrer y Comarca comunicó anoche a la junta directiva su dimisión del cargo que ha ostentado durante los últimos cuatro años y cinco meses. "Me voy -dijo Miguel Ángel García- porque quienes gobiernan en mi pueblo -PP- me han engañado y decepcionado hasta hacerme sentir indignación, vergüenza y pena. Deberían estar al servicio del pueblo, pero durante los tres últimos años se han dedicado a poner trabas a la gestión de quienes estamos al frente de una asociación benéfica con 380 socios y 75 enfermos. Y lo han hecho simplemente porque les hemos exigido que cumplan la promesa que nos hicieron, y que nos cedan la gestión del centro de día en lugar de habérsela dado a una empresa privada que busca ganar dinero a costa del cuidado de nuestros enfermos. Así de claro y de triste".

García confesó ayer que ya no es útil para la asociación porque se siente con las manos atadas y la boca amordaza ante las "injusticias" que denuncia haber sufrido por parte del Ayuntamiento, y más concretamente de la alcaldesa Adela Pedrosa y de la edil de Bienestar Social, Beatriz Serrano, "de la que sigo esperando que dimita", añadió. "Desde 2008 esto ha sido un infierno porque han despreciado el acuerdo de todos los partidos de Elda en la anterior legislatura y han tirado por la borda todo el trabajo que nosotros hemos realizado durante 14 años para conseguir la gestión de un centro donde poder atender dignamente a nuestros familiares. A los políticos de ahora nosotros le cedimos el terreno donde se ha construido el centro de Alzheimer, una partida de 1,5 millones de euros y el proyecto básico aprobado por la propia Generalitat. Pero con ellos -en referencia al gobierno local del PP- lo único que hemos conseguido es una deuda de 97.000 euros porque cambiaron el proyecto original sin consultarnos, nos hemos quedado sin la prometida gestión del centro y con otra nueva promesa, de momento incumplida, de ampliación de las instalaciones municipales donde los enfermos hacen los talleres". Alude, en este sentido, a la Casica del Artista que debería haber sido ya reformada con una partida de 180.000 euros que sigue en el aire.

"Sobre mí se han dicho muchas mentiras pero jamás he tenido intereses políticos ni económicos en este asunto, y si ahora me voy es porque aunque la alcaldesa haga 200 parques y 200 fuentes me ha engañado como persona y como presidente de un colectivo que cumple una función social importantísima para muchas familias, una función que debería estar prestando el propio Ayuntamiento y no lo hace", dijo finalmente Miguel Ángel García recordando el trabajo realizado mientras ha estado al frente de la asociación. Una labor que inició eliminando el déficit que arrastraban las cuentas de la entidad y afrontando el décimo aniversario con el desarrollo de 22 actos, la presentación de un himno, la organización de las II Jornadas de Alzheimer de la Comunidad y la colaboración con decenas de asociaciones locales.

Pero todo eso ya forma parte del pasado porque la dimisión que Miguel Ángel presentó anoche "dolido y frustrado" es irrevocable.