El hundimiento de un techo interior del edificio ubicado en el número 2 de la calle Luís Martí de Monovar, situado enfrente del Ayuntamiento, provocó ayer la consiguiente alarma de la única residente del inmbueble, los viandantes que en ese momento pasaban por la zona y los comerciantes de los alrededores. La techumbre cayó en el interior del inmueble y afortunadamente no causó víctimas dado que el desprendimiento no afectó a la zona que habita la que además es propietaria de la mayor parte del inmueble. Gracias a la rápida intervención de la Policía Local y de la brigada de servicios municipales, alertados por los vecinos, se pudo impedir el paso de peatones y vehículos por la zona.

El siniestro se produjo sobre las 11,30 horas de la mañana de ayer. La Policía Local acordonó la zona de forma provisional hasta que los técnicos municipales se desplazaron al lugar y, ante el peligro de nuevos derrumbes, decidieron cortar el paso a peatones y vehículos en un amplio tramo del centro urbano.

Sobre las 15,00 horas, la Policía Local se personó en el inmueble y desalojó a la dueña del mismo que se resistía a dejar el lugar pese al peligro existente. La puerta de entrada fue precintada.

Las calles José Quiles Mollá, en su primer tramo y en la entrada al Teatro Principal, la calle Teatro, el tramo inicial de la calle Sant Joan y el inicio de la calle Luís Martí, fueron acotadas con vallas y cintas policiales para impedir el paso. El concejal de Servicios, el popular Isidro Tendero, que desde el primer momento estuvo en el lugar de los hechos, señaló a este diario que "menos mal que no ha habido ningún percance humano dado que el hundimiento se ha producido en el interior del edificio".

Tendero avanzó a este diario que "ya se han dado las órdenes para gestionar el corte del servicio eléctrico a este edificio con el objetivo de eliminar posibles riesgos". El edil apuntó en el lugar de los hechos que se iba a ordenar el desalojo urgente y la apertura de un expediente de actuación subsidiaria para el derribo del edificio declarado en ruina. Además., el Ayuntamiento decidió suspender cualquier acto que estuviera previsto en el Teatro Principal, dada la proximidad del inmueble.

Hasta hace un par de años, la planta baja del edificio albergaba uno de los bares históricos , el Bar Filarmónica, que regentaba Pepe Navarro, conocido como "El Poeta". Tras su muerte, sus herederos no llegaron a ningún acuerdo con la dueña del local y decidieron trasladarse a Elda. Desde entonces, el deterioro del edificio ha sido imparable sin que la dueña haya hecho nada por solventarlo.