La Quinta del 84 de Sax se dedicó el sábado un día de festiva convivencia donde no faltaron los reencuentros, los recuerdos y los relatos sobre las aventuras, desventuras, andanzas y batallitas de unos jóvenes -ahora ya no lo son tanto- que hace justo 25 años fueron llamados a filas por el Ejército para cumplir con el servicio militar. Las nuevas generaciones ya no saben lo que es la mili, ni conocen las costumbres con las que los mozos de cada pueblo festejaban la "llamada a quinta" con 19 años recién cumplidos.
Por eso este grupo de sajeños, más bulliciosos que nostálgicos, han vuelto a pasearse por las calles de la villa con el típico capazo. En él solían guardar el dinero, la comida y la bebida con la que los generosos paisanos les obsequiaban, en su ruidosa "batida" casa por casa, antes de que cada uno partiera a su destino tras el agridulce sorteo de plazas.
El sábado cerca de cuarenta componentes de la Quinta del 84, algunos de ellos venidos de las localidades donde ahora residen, también recorrieron el pueblo de punta a punta, como solía hacerse antaño, con el estridente sonido del "chirimitero" por bandera. Pero ésta vez con 45 años a las espaldas y pintando canas. Incluso se colocaron unas camisetas hechas para la ocasión con el anagrama que utilizaron un cuarto de siglo atrás y que cada quinta confeccionaba a su gusto para convertirla en su seña de identidad. Y, como no podía ser de otra manera, también hubo imagen para el álbum del recuerdo. La tradicional foto irreverente en las escalinatas de la Casa Consistorial de Sax.
Diana, traca y desayuno a las nueve de la mañana. A continuación pasacalles y respetuosa visita al cementerio para depositar un centro de flores y una camiseta en homenaje póstumo a los cinco compañeros fallecidos. Luego a la ermita, a darle gracias a San Blas, y para acabar la comida de hermandad en la Ciudad Deportiva. Tuvieron hasta tarta de cumpleaños y soplaron todos juntos, a las velas, con el deseo de volver a reunirse cuando pase otro cuarto de siglo. Entonces celebrarán el 50 aniversario y seguro que vuelven a contarse las mismas batallitas de la mili. Así es la Quinta del 84.
