La reunión celebrada el pasado jueves en la Casa de Cultura para informar a la ciudadanía del proyecto de construcción de la planta para eliminar residuos, de todo tipo, que pretende construir Global Plasma Valencia SL a través de la multinacional Solena Group, dejó claro quiénes son los principales promotores de este proyecto.
El representante de la empresa Global Plasma Valencia SL, el francés Ives Bannel, que a su vez es el director general de Solena Group para Europa, confirmó en dicha reunión que la planta que se pretende construir en Monóvar cuenta "detrás de este proyecto con la participación de Manuel Ríos, cuñado del empresario monovero afincado en Valencia, Silvino Navarro, y que mantiene importantes intereses económicos en la industria de los curtidos y con importantes empresas de este sector en Canals y en el resto del mundo, entre otros negocios".
Bannel también mencionó el apellido Manteca como otro de los impulsores para que Monóvar acoja esta planta en la futura ampliación del polígono industrial El Pastoret.
Una fuente consultada por este diario señaló que "en el año 2003, cuando Manteca ocupaba un alto cargo dentro de la Conselleria que dirigía el alicantino Diego Such, se le juntaron en su despacho dos expedientes: uno era la petición del Ayuntamiento de Monóvar en la que se pedía al SEPIVA la ampliación del polígono industrial El Pastoret; el otro expediente era el de Global Plasma que solicitaba autorización para instalar en la Comunidad una planta, como la que ahora se pretende construir en Monóvar".
Esta misma fuente apuntó que "Manteca, de un plumazo, resolvió el tema de los dos expedientes, señalando que esta planta puede ir muy bien en mi pueblo".
El mencionado Manteca accedió a la Conselleria de Industria de la mano de Diego Such, ya que ambos eran profesores en la Universidad de Alicante y la relación de Manteca con Monóvar se remonta a la época en la que su padre fue notario en Monóvar, de ahí que parte de su infancia y juventud la pasara en el pueblo de Azorín.
Cuestiones en el aire
Por otra parte, la reunión informativa sobre la planta de Global Plasma dejó muchos interrogantes en el aire a los integrantes de la plataforma contraria a esta instalación: ¿Por qué un proyecto previsto para dos tipos de residuos, curtidos y calzado, ahora, de la noche a la mañana, pretende asumir otro tipo de residuos? ¿Cuántos camiones circularan por las carreteras de la comarca y en los alrededores de Monóvar para alimentar de residuos a dicha planta? ¿Cuál va a ser el beneficio por tonelada de residuos que llegue a la planta y se va a embolsar Global Plasma al día? ¿Por qué los promotores sólo hablan de la primera fase del proceso y no del segundo a la hora de eliminar los residuos? ¿Por qué una bióloga y profesora dejó en evidencia en varias ocasiones al representante de Global Plasma y Solena Group en la reunión informativa del pasado día 30 de abril? Y lo más importante, que muchos monoveros se preguntan: ¿Por qué no viene el mismo Silvino Navarro a su pueblo, a Monóvar, a explicar a todos los monoveros las bondades de su proyecto de planta y que no envié a emisarios a hacer el "trabajo sucio"?, según la plataforma.
