Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La pareja acusada de matar a su hijo de dos años en Elche será juzgada el 31 de agosto

La madre y el padrastro se enfrentan a delitos de maltrato y asesinato y se les pide la prisión permanente revisable

La sección VII de la Audiencia, Provincial con sede en Elche, ha fijado para el próximo 31 de agosto el inicio del juicio por la muerte del niño Aaron G.J., de dos años, que sentará en el banquillo a su madre y a su padrasto, quienes se enfrentan a penas de 28 años de cárcel por los delitos de asesinato (25 años) y maltrato (3 años) por lo que se solicita la prisión permanente revisable para ambos.

La defensa, en cambio, pide la libre absolución, rechaza los hecho narrados por la Fiscalía y la acusación particular, que representa al padre del pequeño y a la abuela, y coloca a la madre como una víctima más. La vista oral, ante un jurado popular, tenía que haberse celebrado este mes.

El escrito que sirvió para decretar la apertura de juicio oral relata que el 12 de septiembre de 2018 «los golpes habituales que reflejan una situación de maltrato habitual (...) culminaron con un puñetazo en la cabeza del menor» que lo llevaron al día siguiente a su ingreso urgente en el Hospital del Vinalopó con pérdida de consciencia. Los médicos solicitaron la presencia policial al constatar un posible caso de maltrato infantil. En la documentación judicial se detalla que la versión facilitada por la madre, que según la investigación habría sido la cooperadora necesaria de los hechos, no concordaba con los golpes y hematomas que presentaba el niño y menos se correspondían con una caída casual en la ducha, como alegaba. De hecho, la doctora aseguró en su informe que las marcas que presentaba el pequeño en su cuerpo «parecen tener forma de los dedos de una mano», lo que fue el desencadenante para que solicitara la intervención policial.

El pequeño sufría «múltiples equimosis en tórax y abdomen de diferentes tamaños y evolución, así como hematoma desde la zona parietal izquierda hasta la mejilla, con escoriaciones múltiples», dice el informe sanitario aportado a los autos. Visto el grave estado del pequeño, se trasladó a la UCI Pediátrica del Hospital General de Alicante donde falleció la noche del 13 al 14 de septiembre.

Paliza

En su declaración, el padrastro, al cual las diligencias apuntan como el autor material, aseguró a los agentes que «unos niños del barrio le pegaron una paliza y que no se denunciaron los hechos porque la madre tenía mucho miedo a las posibles represalias».

En la misma declaración llegó a admitir, después de que los agentes le explicaran que el testimonio que estaba prestando no concordaba con el de su pareja, que «el niño siempre presentaba un mal comportamiento y yo le corrijo a base de golpes, sé que no está bien pero es la única forma que conozco» y añadió: «hoy Aaron se ha portado muy mal y he ido a su habitación y como no me ha hecho caso, le he dado un azote en el culo y luego un bofetón en la cara y un golpe (haciendo un gesto con el puño cerrado) en la cabeza y en ese momento se ha quedado inconsciente en la cama».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats