El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española nos indica que la palabra "crisis" deriva del término griego "krísis" (??????), y significa "cambio profundo y de consecuencias importantes en un proceso o una situación". Sin duda, el efecto del COVID19 nos ha conducido irremediablemente hacia una situación de crisis, pero hemos de entenderla como proceso de cambio y oportunidad de mejora.

La pandemia lo está cambiando todo: ha convulsionado nuestro sistema sanitario, económico, social y laboral, incluso nuestras relaciones personales, pero esta crisis debe servirnos de catalizador para una regeneración global que nos haga mejores como individuos y como sociedad. Hemos de sacar conclusiones en positivo para avanzar social y económicamente hacia la solidez y la sostenibilidad, y ello pasa necesariamente por una regeneración en clave ecológica que nos conduzca a un modelo de ciudad verde que mejore sustancialmente nuestra calidad de vida.

Hoy viernes, Día Mundial del Medio Ambiente, es importante destacar que en Elche hemos empezado a recorrer este camino de reconstrucción sentando las bases de una ciudad respetuosa con el territorio y con el medio ambiente. Y lo estamos haciendo siguiendo las pautas que viene marcando la Comisión Europea en su Green Deal (Plan Verde Europeo) para la salida de la crisis, y que asumen tanto el Gobierno de España como el Consell valenciano. De hecho, la UE ha anunciado un Fondo Europeo de Recuperación para hacer frente a la crisis del coronavirus que supone una inyección de 750.000 millones de euros, de los que 140.000 millones van destinados a España. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya ha anunciado que llevará a Bruselas una propuesta de recuperación en estos términos, e igualmente el presidente de la Generalitat, Ximo Puig ha trasladado al vicepresidente de la Comisión Europea para el Pacto Verde, Frans Timmmermans, que la Comunidad Valenciana priorizará las inversiones asociadas a estos criterios medioambientales.

Como ciudad que aspira a ser Capital Verde Europea en 2030, Elche asume los criterios de sostenibilidad que marca el Pacto Verde Europeo, y consideramos que la reconstrucción tras la pandemia debe incluir un compromiso de regeneración de nuestras ciudades en clave ecológica. ¿Qué implica esta hoja de ruta? Significa una visión global y transversal de nuestro desarrollo desde el prisma del respeto medioambiental, y obliga a plasmar dicha visión en un Plan Estratégico de acción concreta que presente la protección medioambiental, no como un freno al progreso, sino como una oportunidad de desarrollo alternativo que reoriente y diversifique nuestra economía. Así lo estamos reflejando en nuestro Plan Estratégico Elx-2030, con el que aspiramos a ser reconocidos como capitalidad verde europea. Para nosotros, ser una ciudad verde significa:

-Una política urbanística basada en la rehabilitación urbana y en la racionalidad para con el territorio.

-La regeneración de nuestros espacios degradados, naturales y urbanos.

-La progresiva sustitución del uso de materiales contaminantes por los biodegradables.

-Una movilidad alternativa que priorice al peatón, refuerce el transporte público y fomente vehículos menos contaminantes.

-Un impulso a la ecoinnovación, es decir, la innovación tecnológica medioambientalmente limpia para la industria y el conjunto de los sectores productivos.

-Un incremento de la protección de nuestros espacios naturales y del Palmeral como el gran pulmón verde de nuestro territorio.

-La racionalidad en el consumo de agua y la apuesta decidida por el uso de las aguas depuradas.

-La implantación obligatoria de sistemas de eficiencia energética.

-La apuesta por la economía circular mediante la promoción de hábitos de consumo sostenibles basados en la reducción, la reutilización y el reciclaje.

Estos son los criterios de actuación que nos hemos marcado para alcanzar el objetivo de convertir Elche en un referente como ciudad verde y en un modelo a seguir para mejorar nuestra calidad de vida. La Unión Europea se ha marcado como objetivo ser climáticamente neutra en 2050, es decir, reducir a cero las emisiones de efecto invernadero. Para lograrlo, aprobará próximamente una Ley Europea del Clima con el fin de convertir el compromiso político en obligación jurídica. Es una gran apuesta que implica, desde el momento presente, un cambio drástico en nuestro modelo de desarrollo. Elche se está preparando para este cambio y lo presentamos como opción de mejora, como una oportunidad para emprendedores, para crear nuevos yacimientos de empleo e iniciativas empresariales, para impulsar nuevos modelos educativos y promocionar nuevas pautas de comportamiento.

Tenemos por delante un gran reto colectivo con el que saldremos reforzados de esta crisis. Pero necesitamos la confluencia de todos, la unión de esfuerzos e ilusiones para construir la ciudad verde que queremos. Hago un llamamiento al conjunto de la sociedad ilicitana para que alcancemos el pacto social y el consenso político necesarios para lograr este objetivo de futuro para Elche. En esta ciudad contamos con experiencia contrastada a la hora de gestionar desde la unidad los grandes retos a los que nos hemos enfrentado. Lo demostramos con el consenso alcanzado para crear la Universidad Miguel Hernández, y lo volvimos a demostrar con las dos declaraciones de la UNESCO para nuestros Patrimonios de la Humanidad. Ahora es el momento de repetir esa unidad para lograr el objetivo común de convertir nuestra ciudad en un referente de calidad de vida y de respeto a nuestro entorno.