Al igual que ocurriera a finales de la semana pasada, y pese a los continuos avisos de no acudir en masa para no favorecer los contagios y, al mismo tiempo, evitar el desabastecimiento en pocas horas, algunos vecinos ya se apostaban en cola este lunes minutos antes de la apertura a las puertas de algunos supermercados.

Poco antes de las nueve de la mañana ya se podía ver a algunos compradores guardar fila con los carritos de la compra para abastecerse. Algunos, los menos, llevan mascarilla de protección. La mayoría trata de guardar el metro y medio de separación entre unos y otros. El caso es que vuelven a repetirse situaciones que desde las autoridades se insiste en evitar como es la aglomeración de gente.

Algunas cadenas de supermercados del país ya han anunciado que están protegiendo a los trabajadores con utensilios de higiene a prevención, además de recortar su horario y realizar desinfecciones y limpiezas especiales.

Además, algunas empresas han optado por suspender el servicio a domicilio, además de reforzar la plantilla para garantizar el servicio.

A ello se suma controles de aforo, más vigilantes de seguridad y señalización para ayudar a mantener la distancia de seguridad. De igual modo, en algunas tiendas se informa de que no se están admitiendo devoluciones dada esta situación excepcional.

Mientras tanto, Elche ha amanecido con tráfico ligero, muy poca gente en la calle. Salvo algún jubilado despistado que salía a pasear y ciudadanos de camino a su trabajo, lo más frecuente es encontrarse al personal de limpieza viaria, incluso con mascarilla puesta, o a trabajadores de parques y jardines.

Los juegos infantiles en espacios públicos siguen precintados, así como algunas zonas verdes de la ciudad. Los pequeños comercios de alimentación tienen sus puertas abiertas mientras que la clientela guarda la cola con la distancia recomendada y aguardando en la calle para que, por lo general, no coincidan más de dos compradores en el establecimiento.

También se podía ver esta mañana a personas haciendo running, mientras efectivos policiales recorren las calles para cerciorarse de que no se generan problemas.

Obreros de reformas continuaban con sus tareas en la ciudad, servicios de odontología permanecían abiertos pero sin gente, mientras que peluquerías del centro aparecían cerradas.

Mucho silencio en la calle, escaso tráfico rodado, calma tensa y servicios municipales al mínimo marcan las primeras horas del día de hoy lunes en Elche donde el teletrabajo se ha impuesto, aunque también continúa la confusión entre algunos trabajadores que no ven claro las medidas a adoptar bien por el Gobierno, bien por sus propias empresas para afrontar esta crisis del coronavirus y el estado de alerta impuesto.