La comarca del Baix Vinalopó cuenta con un total de 29.262 personas desempleadas, según los últimos datos del mes de febrero, facilitados por el SEPE y Labora-Servef. Una cifra que sube en 297 personas en comparación con la del mes de enero, aunque la tónica no ha sido igual en los tres municipios de la comarca. Mientras que en Elche y Santa Pola el número de parados se ha visto incrementado, en Crevillent el desempleo ha bajado, aunque sólo ligeramente. La mayor parte de los nuevos parados, 221, son del sector servicios.
En Elche, a fecha de 29 de febrero, habían 23.379 personas demandantes de empleo, que son 301 más que hace un mes. La mayoría de estos nuevos parados ha trabajado anteriormente en el sector de los servicios, donde perdieron el empleo durante el último mes 242. El único sector en el que, según estos datos, se creó empleo fue el de la agricultura, donde el paro bajó en 22 personas.
El desempleo también subió en Santa Pola, donde actualmente hay 2.732 personas demandantes de empleo. En la villa marinera se registraron en febrero 21 nuevos desempleados. El paro subió principalmente en la industria y los servicios.
El dato más positivo en la comarca lo ha dado en esta ocasión Crevillent, donde el desempleo ha registrado un ligero descenso, con 25 personas menos que el mes anterior. A diferencia de lo que ha pasado en otras localidades, en Crevillent ha sido el sector servicios el que más puestos de trabajo generó. En total hay 3.151 parados.
El análisis comarcal que ha realizado CC OO refleja que estos datos son malos, pero que, no obstante, reflejan una disminución del paro interanual. En este sentido, la comarca cuenta en la actualidad con 406 parados menos que hace un año. En los últimos doce meses el número de desempleados ha bajado en 439 personas en Elche, mientras que en Crevillent el descenso interanual es de 114 personas. En Santa Pola, por el contrario, el paro ha subido en el último año en 147 personas.
No obstante, los datos evidencian que las mujeres sufren más el desempleo que los hombres. En febrero habían perdido su trabajo 430 mujeres más que hace un año, mientras que los hombres eran solo 24 menos.
Ante esta situación, desde el sindicato Comisiones Obreras insisten en la necesidad de «tomar medidas y dar pasos para el cambio real de modelo productivo que necesitamos para tener estabilidad en el empleo, puesto que sin empleo de calidad no hay recuperación real».
La secretaria general de CC OO Vinalopó-Vega Baja, Carmen Palomar, añadió ayer que «el empleo de calidad ha de ser un objetivo de primera necesidad, y debe estar en la agenda política y sindical entre el Gobierno y los agentes sociales, ya que está cuestión es lo que hará posible evitar las brechas sociales y, en consecuencia, la exclusión social».
