Las sanciones relacionadas con el consumo de drogas al volante son ya el grueso de las infracciones registradas por la Unidad de Policía Judicial de Tráfico de la Policía Local de Elche. De los 1.445 delitos relacionados con la Seguridad Vial recogidos por esta unidad durante el pasado 2019, 490 fueron por sanciones administrativas por consumo de drogas, que deben ser ratificadas tras las pruebas de laboratorio, que es necesaria para aplicar la sanción pertinente. Estos atestados se remiten al juzgado, donde la Fiscalía de Seguridad Vial sigue de cerca por su preocupante incremento durante los últimos años.
El consumo de alcohol es la segunda causa de multa, con 457 sanciones. Sin embargo, el alcohol se lleva la peor parte en cuanto a delito se refiere, pues 275 casos fueron tramitados por vía judicial, al superar la tasa máxima de 0.6 miligramos por litro de aire expirado, mientras que en el caso de los estupefacientes los casos se redujeron a solo 9. El motivo fundamental es que la legislación es más dura en cuanto al consumo de alcohol, ya que hasta hace unos años la ingesta de drogas no se controlaba por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, por lo que la mayoría de casos quedan en sanciones administrativas, con 1.000 euros de multa y la pérdida de seis puntos del carné. En el informe elaborado por la antigua unidad de Atestados destaca también que el alcohol continúa siendo la principal infracción que causa accidentes, pues de los 102 delitos que se tramitaron tras un siniestro en vías urbanas, en 74 ocasiones se había ingerido alcohol.
Las fugas son otro quebradero de cabeza para los agentes, ya que si bien se han estancado en los últimos años, aún representan un 15% de los atestados atendidos por los agentes, que solo dan con los autores en el 60% de los casos. Los datos señalan que hubo 416 fugas en los 2.716 siniestros registrados, y se solucionaron 248. En el último año, una reforma del Código Penal introdujo el delito de abandono de lugar del accidente, para considerar delito no solo aquellos casos en los que se producen heridos, sino también otros como choques o colisiones de menor importancia en el que el conductor opta por darse a la fuga para no asumir los daños ocasionados por ese suceso. Por este nuevo delito ya han sido acusados dos personas por parte de la Policía Local de Elche en el último año, según los datos facilitados por los agentes.
En total, la Policía Judicial de Tráfico de la Jefatura ilicitana registró durante todo el año 2019 2.716 accidentes de tráfico, un 11,8% más que el año anterior. Pese a ese aumento de siniestros, destaca la cifra de reducción de heridos, que se han reducido un 10%. Esto se debe, entre otras causas, a que ese aumento de accidentes se debe a la mayor presencia de vehículos en las calles, tras la reactivación económica de los últimos años, que ha aumentado el parque móvil, y a que «precisamente ese mayor tráfico reduce la velocidad de circulación y hace que los siniestros sean más leves», explica el oficial de la unidad, Roberto Santiago. Esa tendencia a la baja en cuanto a siniestros con heridos ha sido una contante en los últimos años, hasta el punto de que se ha alcanzado «un descenso acumulado del 54% en los últimos cinco años, pasando de casi 900 lesionados en 2014 a 577 en 2019», explica el oficial en su informe.
Estos 577 accidentes con heridos se tradujeron en 685 personas lesionadas -en algunos vehículos viajaban más de un ocupante que sufrió lesiones-, muy lejos de los 1.231 de 2014. La mancha en esta estadística la ponen los tres fallecidos en la carretera en Elche durante el último año, frente a los cero fallecidos de 2018 en vías de titularidad municipal. Dos de estos tres casos fue tramitado como delito de homicidio imprudente, mientras que el tercero de los fallecidos se consideró accidente sin implicaciones penales para el responsable. Además, dos de ellos fallecieron en un accidente de coche, mientras que el tercer fallecido fue un peatón.
En cuanto a las zonas con mayor número de accidentes, el núcleo urbano se lleva la peor parte, al ser el punto de mayor concentración de tráfico, con 1606 accidentes con daños materiales de los 2.140 contabilizados durante todo el año. También es la zona con más heridos, con 454. En las zonas rurales, destaca especialmente El Altet, donde se contabilizaron 60 accidentes con daños materiales. La sigue la partida de Carrús, que engloba desde el polígono con el mismo nombre hasta el término municipal de Aspe, con 47 accidentes materiales. Arenales del Sol, con 41 casos, se lleva la medalla de bronce. Sin embargo, si se tiene en cuenta el número de heridos, Carrús se lleva la peor parte, con 14 casos, seguido de Atzavares con 13. En tercer lugar están las partidas del Polígono Industrial de Saladas y Arenales del Sol, con 9 heridos en cada una de estas zonas.
Atestados incorpora un nuevo sistema de recuento de colisiones en puntos negros
Los agentes van a tener información por primera vez de los accidentes que se resuelven con un parte amistoso y de los que no tenían constancia documental
Elche tiene 67 puntos negros a lo largo de todo el término municipal. Se trata de cruces, rotondas o puntos kilométricos en los que se registran más de tres accidentes al año. Una cifra que ha aumentado notablemente con respecto al año pasado gracias, en parte, al nuevo sistema implantado por la Policía Local de Elche para controlar todos estos accidentes en la ciudad. La Unidad de Policía Judicial de Tráfico ha comenzado a utilizar la aplicación Siniestros Viales, que permite «obtener más y mejor información sobre su producción, independientemente del resultado que va ligado a multitud de factores. El registro de mayor cantidad de siniestros, incluyendo todos aquellos con resultados único de daños materiales, permite poder establecer un patrón y detectar posibles puntos negros que sin su registro quedan ocultos y ajenos a una posible acción preventiva!, explica el oficial de la Unidad, Roberto Santiago.
El mayor punto negro de la ciudad se encuentra en la rotonda de acceso al Polígono de Carrús, en la calle Almansa, donde el año pasado se registraron 20 accidentes. Le sigue el aparcamiento del Centro Comercial El Sauce, en la carretera de Crevillent, con 18 siniestros. Precisamente otro aparcamiento, en este caso el del Centro Comercial l'Aljub, también se registró un elevado número de colisiones, 15, la misma cifra que en la rotonda que une la avenida del Bimil.lenari con la avenida de la Unesco. El entorno del aeropuerto, con 12 siniestros, es otro de los puntos de mayor concentración de accidentes.
Con 10 casos se encuentran el cruce de la ronda oeste de Carrús con la avenida Crevillent, así como la rotonda de la avenida de la Libertad con la avenida de la Unesco. Pocos metros más al oeste, en la avenida del alcalde Vicente Quiles, el tramo de avenida desde el puente de Ferrocarril hasta la UMH, también se dan 9 accidentes.
La avenida de la Libertad y la del alcalde Ramón Pastor, por su elevada extensión, también concentran numerosos accidentes, especialmente en los cruces con Cristobal Sanz o Federico García Lorca.
Horarios
Los horarios de mayor número de concentración de accidentes coinciden con la entrada y salida de los escolares al colegio pero también con las entradas y salidas a los puestos de trabajo. Así, a primera y última hora de la mañana, y a última hora de la tarde, es cuando más atestados se levantaron en la ciudad en el último año. El mayor tráfico a estas horas está detrás de estos datos, como también demuestra el hecho de que la mayoría de accidentes se registre entre semana, de lunes a viernes, con los martes como día de mayor incidencia, según los datos de la Policía Local de Elche.
Esta es la razón de que también se hayan aumentado notablemente los controles se seguridad vial entre semana, donde se da una mayor incidencia de drogas. Mientras que el consumo de alcohol se concentra principalmente los fines de semana, en cuanto a drogas no se siguen estos patrones y su consumo se da por igual cualquier día de la semana.
Por época del año, en verano es cuando menos accidentes se producen, debido al descenso del tráfico durante el periodo estacional. Por el contrario, abril, mayo y noviembre son los meses con mayores siniestros, debido a que son también los meses más lluviosos, lo que hace que haya más tráfico y, a la vez, más probabilidad de accidentes por el estado del asfalto.
Ahora, con el nuevo sistema de control de accidentes, el reto pasa por reducir los puntos negros mejorando la circulación en estos puntos y aplicando medidas de control de tráfico.
