Hace unos días, el Gobierno del Estado, en una contestación a una pregunta de Carles Mulet, senador de Compromís, volvía a desestimar una posible vuelta, con carácter definitivo, de la Dama a Elx y, recordaba las condiciones en las que «podría estudiar» una posible vuelta temporal, en su caso, estableciendo una serie de condiciones y trámites.

No puede decirse que sea una novedad. Llevamos así casi desde que estuvo aquí por última vez, en 2006, oyendo que la Dama debe volver y que los trámites para ello están avanzados. Casi quince años en los que todos los alcaldes que ha habido, del PSOE y PP, nos han prometido su pronto regreso. En algunos casos parecía que era la actividad más importante de su mandato. Las gestiones, viajes, promesas, etc. han sido múltiples en estos años. Nunca Madrid aprobó dicha vuelta. Lástima que para muchas otras cosas necesarias para el municipio no se le hayan dedicado tantos esfuerzos. Y así nos está yendo, por cierto.

Y, mientras aquí se nos decía lo cerca que estaba la vuelta de la Dama y que, con ello, Elx recibiría un revulsivo que nos pondría a encabezar no sé cuántas cosas, en otras ciudades en vez de tanta promesa, actuaban. Es el caso de Jaén. Ya lo comenté en anterior ocasión.

En diciembre de 2017 se inauguró por el Rey Felipe VI, en la ciudad de Jaén, el Museo Ibero. Con una inversión de 27 millones de euros y un espacio expositivo posible de 11.152 metros cuadrados, de los cuales la exposición permanente ocupará 2.500 metros cuadrados. Dicha inversión ha sido aportada por la Junta de Andalucía y los fondos europeos. Hay que recordar que Jaén tiene 112.999 habitantes, menos de la mitad que Elx y no se ubica, precisamente, en ninguna ruta turística reseñable. En su primer año de actividad se generaron 73.000 visitas a dicho museo. Y, recientemente, el Estado ha acordado con la Junta de Andalucía, su integración en la Red Nacional de Museos lo que, dada su singularidad en el mundo ibero, le permitirá favorecer la cesión de piezas de titularidad estatal. Es el museo de referencia en estos momentos en el ámbito ibero.

Y en Elx seguimos recibiendo promesas, desde nuestro Ayuntamiento, de que nuestra Dama vendrá cualquier día de estos. Siempre va todo sobre ruedas. Según nuestro alcalde, se están dando continuos pasos para acercar la Dama. Tal vez y sin darnos cuenta, hasta la hayamos dejado atrás de tanto acercarnos. La cuestión es que aquí ni está ni se le espera de una manera confirmada. Hasta se consiguió implicar a la Consellería en el tema, creando una Comisión Bilateral. Con escaso resultado, por cierto. Se han implicado más que en el tema del Mercado Central, que ya es decir y lamentar. Hasta alguien decidió que sería conveniente, llegado el caso, desmantelar el MAHE para ubicar allí un contexto ibero, en detrimento del resto de la colección, para que la Dama estuviera allí unos meses hasta que volviera a Madrid. Ni así ha venido ni hay compromiso de que venga, por mucho que nos lo prometan a cada momento.

Pero tampoco llegan inversiones para mejorar nuestro patrimonio histórico. Lo de Jaén con la Junta aquí sería un espejismo. Ni siquiera nos han devuelto los 43 millones que Elx puso para que llegara la Universidad y eso que Ximo Puig lo prometió. Recientemente hasta desde el propio Ayuntamiento se tenía que recordar que estaba pendiente la promesa. En eso sí, no hay nadie que a promesas nos gane. Y siempre hay palabras comprensivas cuando se incumplen, tan comprensivas que algunos pensarán que en Elx sale barato no cumplir.

Y no será que aquí no hace falta ayuda de la Generalitat para rehabilitar patrimonio. Recientemente se informaba de la situación del Molí Real, elemento emblemático local y del peligro de derrumbe que padece por corrimientos en la ladera en la que está. Esperemos que llegue la solución antes que la destrucción. También se podrían recordar las promesas de rehabilitación que han recibido las Clarisas, otro monumento local insigne. O las propias reformas que se necesitan en el MAHE. O el estado en el que se encuentran los baños árabes descubiertos en el Mercado Central. Etc.

Por no hablar de promesas más recientes, en el ámbito cultural, como la remodelación y salvaguarda del Hort del Gat. O esa otra que ya empieza a difuminarse, de la construcción de un Auditorio, luego nuevo Centro de Congresos y ahora mera promesa incumplida. Por no citar otras. Es evidente que Elx necesita que mucha más inversión llegue aquí y para ello urge más gestión y ser más reivindicativo que autocomplaciente. Lo de la Dama no puede seguir tapando tantas insuficiencias e incumplimientos. Es necesario otro ritmo y mayor eficacia.