Los propietarios de las nuevas viviendas sociales de San Antón están de enhorabuena. El Ministerio de Hacienda ha accedido a devolver el IVA de las subvenciones concedidas al Ayuntamiento para la construcción de los nuevos pisos, tal y como informó el alcalde, Carlos González, a los residentes del barrio.

Las 74 familias del primer edificio percibirán 3.131euros por vivienda. En total supone un ahorro de más de 231.700 euros. A los 120 titulares del segundo bloque (que están a la espera de recibir las llaves todavía y que han pagado entre 15.700 y 23.000 euros por domicilio) se les abonará entre 3.235 euros y 4.556 euros, lo que supondrá un total de 438.600 euros. La suma de las devoluciones de ambos inmuebles supera los 670.000 euros. De este modo, las gestiones realizadas por el equipo de gobierno y la empresa municipal, Pimesa, han dado sus frutos tras varias reuniones en València y Madrid.

El inconveniente con el que se encontraron los vecinos cuando compraron sus viviendas es que el IVA repercutido por el Ayuntamiento a los compradores incluía en su base imponible el valor de las ayudas recibidas por el Consistorio en la construcción de las nuevas viviendas, incrementándoles el precio para calcular la base sobre la que aplicar el impuesto.

El Ayuntamiento y Pimesa no estaban de acuerdo, tal y como señalaron ayer en un comunicado, con el tratamiento tributario que las subvenciones obtenidas para la renovación del barrio suponía para los vecinos, al tener un impacto muy negativo en personas vulnerables, en general, con escasos recursos económicos y que habían realizado un grandísimo esfuerzo en la adquisición de las viviendas de nueva construcción.

Ahora, la Dirección General de Tributos ha dado la razón al Consistorio y ha asegurado que en estas circunstancias, la concesión de la subvención no ha de incluirse en la base imponible de las operaciones de entregas de las viviendas calificadas como protegidas que realiza el Ayuntamiento. Como consecuencia de ello, el IVA a repercutir a los propietarios es inferior al reflejado en las compraventas realizadas, lo que implicará la devolución a los vecinos de cantidades muy significativas y que no se esperaban.

Referencia

El equipo de gobierno puso en valor ayer las gestiones realizadas en San Antón, junto con la empresa municipal Pimesa y apuntaron a que este reconocimiento por parte de Hacienda va a suponer un «ejemplo a nivel nacional» en el tratamiento fiscal de la política de rehabilitación y renovación urbana.