Todos los sentidos de Oriente se trasladaron anoche a Elche en una velada repleta de colorido, música e ilusión por unir a la familia y recibir regalos de sus Majestades Melchor, Gaspar y Baltasar. La Cabalgata de Reyes fue una de las más numerosas que se recuerdan en los últimos cinco años en la ciudad, con más de 700 personas participando en un desfile en el que no faltaron los caramelos, en concreto 6.000 kilos, las danzas variopintas y sobre todo, el espectáculo que se vivía encima de cada una de las doce carrozas, engalanadas para la noche más mágica del año. A pesar de los nueve grados que marcaban los termómetros, los visitantes entraron en calor rápidamente con los animados ritmos que brotaban de las bandas musicales de la ciudad, la dolçaina y el tabalet y la infinidad de villancicos que todos los asistentes entonaban por el recorrido del desfile, que partió desde el colegio de la Asunción y se dirigió por el entorno de la Plaça de Baix hacia la Corredora para culminar con un castillo de fuegos artificiales a la llegada de Sus Majestades al Belén Viviente, instalado en el Parque Deportivo, para honrar al niño Jesús en el pesebre.

Siguiendo el camino de los Reyes Magos había una extensa comitiva. Abriendo paso se encontraban los bomberos del parque de Elche, que un año más se involucraron en el acto festivo y atrajeron a los más curiosos con las sirenas de uno de los camiones históricos de la flota. Dando una nota más artística se encontraban 44 miembros del Club de Patinaje de Elche, que realizaron una extensa coreografía con acrobacias en patines y captaron la atención en varios momentos con una exhibición de saltos, donde la precisión fue el valor que sobresalió, ya que los patinadores saltaron por encima de otros cinco miembros que se encontraban en el suelo. Las doce carrozas dieron el toque más majestuoso a la Cabalgata, donde se encontraban miembros de entidades festeras de la localidad alegrando esta cita repleta de magia.

La cabalgata estuvo separada en cinco bloques, tal y como avanzó el Ayuntamiento recientemente, aunque en realidad el desfile estuvo bien integrado y convivieron tanto protagonistas de los clásicos cuentos como Aladín y Jazmín en palacio con su alfombra mágica, el reino helado de Frozen, los Lego y Transformer o incluso Peter Pan y Campanilla, que hicieron que Elche se convirtiera por unas horas en la ciudad de los sueños. Después de varios grupos de baile que dejaron una estampa fantástica junto al humor de los zancudos, se dio paso al sentido más bíblico. El grupo Jerusalem portaba las palmas con un cortejo de hebreos, ángeles, pastores o campesinos junto a la estrella de la anunciación, que se adelantaron al boato de los Reyes Magos acompañados de los pajes, que después de una larga travesía hasta llegar a tierras ilicitanas saludaban desde las alturas en sus esplendorosas carrozas a niños y niñas, que ansiaban caramelos y, sobre todo, que se cumplieran sus deseos. Precisamente ayer por la mañana Sus Majestades de Oriente recibieron las cartas de los más pequeños desde el Palacio de Altamira después de las largas colas que hicieron las familias al completo. Se produjo un cálido recibimiento de los Reyes Magos en la ciudad ya que, como novedad, las bandas de cornetas y tambores de la Cofradía de la Sangre de San Antón y de la Hermandad de Flagelación y Gloria interpretaron temas navideños y villancicos junto a Melchor y Gaspar. Baltasar, por su parte, fue acompañado por una animada batucada. Al terminar la Cabalgata centenares de niños y niñas encendieron «les atxes» -elemento típico del Día de Reyes en Elche- para guiar a los Reyes Magos con estos restos de palmera que emiten humo al prender y que durante meses han estado elaborando artesanos de la ciudad.

La asistencia a la Cabalgata fue todo un éxito, ya que se vendieron cerca de 8.000 localidades, 5.000 por vía online, que se agotaron en apenas horas, así como de manera presencial el resto. Además, el poder de Sus Majestades era tan fuerte que varias pedanías también tuvieron su cabalgata, como Torrellano Alto o Algoda, Matola y Puçol, que prepararon un desfile de 13 kilómetros entre veredas rurales, entre otras.

Día de Reyes

Hoy los más pequeños de la familia podrán disfrutar de todos los regalos que han recibido y agradecérselo a los Reyes de Oriente. Para ello, y siguiendo la tradición ilicitana, de 12 a 14 horas se podrá visitar el nacimiento viviente que tiene instalada la asociación histórico artística de Pobladores en el Parque Deportivo. Con ello comienza un año cargado de ilusión.