Con diez años a sus espaldas, la Unión Musical de Torrellano ha grabado estos días un tradicional villancinco - jingle bells- para felicitar las navidades a todos los ciudadanos que siguen sus actividades y conciertos.

El vídeo, simpático y original, parte de un inoportuno olvido: nadie se ha acordado de citar al medio centenar de músicos a la grabación. La solución pasa porque cada uno de los integrantes se grabe tocando una (o varias) de las notas, que alguien se encargará después de darles forma. «¡Que no haya ningún despistado!» que se olvide de un trozo, piensan dos de los organizadores, que abandonan la sala de ensayos pensando en que cada uno de los músicos se pondrá un «vestuario elegante» para la ocasión.

Nada más lejos de la realidad. A partir de ese instante y en un perfecto orden se comienzan a intercalar las imágenes de los músicos, cada uno en su quehacer diario -alguno en posiciones un tanto irreverentes, como poner los pies encima de un piano- para una grabación que, en su conjunto, acaba de forma perfecta.

Diez años después de su formación Torrellano tiene en esta familia de músicos y de amigos, de todas las edades y condiciones, un motivo más para celebrar las fiestas y recordar la importancia que siempre tendrá en ellas la magia que surge de sus instrumentos.