El presupuesto de 2020 del Ayuntamiento de Elche pasó ayer el último trámite ante de ir a pleno el próximo martes. La comisión de Hacienda aprobó el documento solo con los votos del equipo de gobierno (PSOE y Compromís). La oposición cerró filas esta vez y rechazó las cuentas municipales que se elevan a 242 millones de euros para el próximo año.

PP, Ciudadanos (Cs) y Vox se pusieron de acuerdo para dejar solos al equipo de gobierno, dejando entrever cuál será su postura en la votación del próximo día 17 en el salón de plenos, donde el ejecutivo local impondrá su mayoría. La negativa era de esperar de los populares, que ya advirtieron que supeditaban su apoyo a una bajada de los impuestos. Y también la del partido de Santiago Abascal, muy molesto tras negarse el ejecutivo local ni siquiera a escuchar sus propuestas.

Fue la formación naranja la que dio la sorpresa, sobre todo, tras asegurar el alcalde, Carlos González, una semana antes que aceptarían el 70% de sus sugerencias para el presupuesto. Y, sobre todo, tras la buena sintonía que su portavoz, Eduardo García-Ontiveros, lleva escenificado con el equipo de gobierno en los últimos meses.

Sin embargo, el principal argumento que dio ayer Cs para aislar al equipo de gobierno fue también su oposición al aumento de la presión fiscal para 2020. Su cabeza visible advirtió que la aportación de Cs a las cuentas, «no era un cheque en blanco» y que ya votaron en contra en su día de la subida de tributos.

De cualquier manera, el bipartito tiene vía libre para aprobar este año los presupuestos, al tener 14 concejales, frente a trece de la oposición. Unos presupuestos que prevén un descenso de la recaudación de impuestos directos de alrededor de 700.000 euros, al pasar de 89,2 millones percibidos en 2019 a los 88,5 millones que estima la Concejalía de Hacienda para 2020. Todo ello, tal y como recalcó la edil del área, Patricia Macià, pese a que el ejecutivo local subirá un 1,5% los principales tributos, tasas y precios públicos bajo el argumento que el gasto aumenta. Esa bajada de ingresos en las arcas municipales (del 0,78%) se debe, según explicó la concejal de Hacienda, principalmente, al descenso de la recaudación por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que creció en 2018 y 2019 tras la regularización catastral y el pago de atrasos de construcciones no declaradas. Para 2020 la previsión municipal es ingresar 61,1 millones de euros por el principal tributo del Ayuntamiento.

Por el impuesto de circulación, el IVTM, Hacienda estima unos ingresos de 13,1 millones de euros. Este año, el Ayuntamiento puso al cobro 12,4 millones. Por la plusvalía esperan aumentar la recaudación a 5,7 millones de euros tras ceder el cobro a Suma, para mejorar la eficacia recaudatoria. El año pasado, el Consistorio ilicitano liquidó 7,2 millones de euros, la segunda cifra más alta desde 2015, pero solo ingresó dentro de plazo 4,6 millones por el tributo vinculado a la compraventa y las herencias.

Por último, por el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), Hacienda estima recibir el año que viene 5,9 millones de euros.

Inversiones

El presupuesto municipal implicará un aumento del gasto de un 14,5% y supondrá una inversión de 159 euros por vecino. Las áreas de Cultura y Promoción Económica (talleres de empleo) y Educación serán las que más crezcan en inversiones. El Ayuntamiento tiene contemplado invertir 19,4 millones de euros; Pimesa, 11,1 millones y Aigües d'Elx presupuesta 6,3 millones. Todo ello suma 36,8 millones. De ese montante, 2 millones están supeditados a venta de terrenos y 2,7 proceden de los fondos europeos Edusi.