La Sección Séptima de la Audiencia Provincial con sede en Elche, ha condenado a dos años de prisión a un acusado de almacenar y distribuir pornografía infantilen la pedanía de La Mata, en Torrevieja. La Brigada de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de la Policía Nacional detectó el intercambio de estos archivos dentro del rastreo rutinario que realizan en la red para evitar este tipo de contenidos. Así, tuvieron conocimiento de que «circulaban por internet en diferentes direcciones» material «consistente en menores de edad que mantenían relaciones sexuales con adultos», lo que llevó a abrir una investigación en un juzgado de Instrucción de Torrevieja, según reza el texto del acuerdo de conformidad entre la defensa y la Fiscalía que establece la condena. Las pesquisas llevaron hasta una dirección IP domiciliada en una vivienda de La Mata. Allí se incautaron del material almacenado en un ordenador y en un teléfono móvil, con el que se descargó el contenido a través de conocidos programas de intercambio de archivos. Con ellos procedió a «descargar vídeos y fotografías pornográficas donde se utilizaban a menores de edad, permitiendo de forma consciente y voluntaria la subida a la red y su descarga a otros usuarios».

En su escrito, la Fiscalía describe prácticas muy denigrantes en las que participaban niños y niñas de muy corta edad, incluso bebés, y en las que había una alta violencia física. También se descubrió material zoofílico con menores, según se desprende del escrito de acusación reconocido por el acusado. El Ministerio Público considera estos hechos como un delito de corrupción de menores, por lo que propone una pena de dos años de prisión, en una sentencia que ya es firma al aceptar los hechos el acusado y firmar este acuerdo de conformidad.

Como consecuencia de estas investigaciones, también se logró detener a otras personas que habían descargado y distribuido este material pedófilo. Fuentes judiciales señalaron que es frecuente que en este tipo de operaciones se acabe deteniendo a decenas de personas, ya que una vez los agentes han identificado qué archivo contiene este material, es fácilmente rastreable a través de la red y detectar a todos los usuarios que lo han descargado.

El acusado, al ser la pena inferior a los dos años y un día, no entrará en prisión, pues la Fiscalía no se opuso a la suspensión de la pena, condicionada a que no vuelva a delinquir y participe en programas de educación sexual. Además, el condenado estaré en libertad vigilada tres años.