La Sección Séptima de la Audiencia Provincial condenó ayer a cinco acusados de distribuir droga por diferentes localidades de la Vega Baja y Murcia a dos años de prisión, gracias a un acuerdo de conformidad entre el Ministerio Público y las defensas, que evitó el juicio programado. Los acusados reconocieron en el acuerdo los dos delitos de los que se les acusaba, tráfico de estupefacientes y blanqueo de capitales. Además, se condenó a nueve meses de prisión a otras dos personas que colaboraban con los principales acusados en la distribución de estos estupefacientes.

Las investigaciones se iniciaron por parte de la unidad provincial antidroga de la provincia hace doce años. Durante meses estuvieron siguiendo a los implicados e intervinieron sus números de teléfono, que usaban para esa venta y distribución a terceros de los estupefacientes.

Las primeras detenciones, las de dos de los acusados se produjeron en marzo de 2008 cuando ambos viajaron a Murcia a proveerse de droga, Los agentes los interceptaron con cocaína y hachís. Más tarde, gracias a las intervenciones telefónicas, se detectó una reunión entre el resto de los implicados, en otra localidad murciana. Allí los agentes encontraron varios kilos de cocaína, así como otros tantos de sustancia de corte y elementos para la manipulación de la droga.

Como una red

El Ministerio Público acusaba a los siete implicados de actuar como una red de tráfico de drogas en el sur de la provincia y Murcia. Los implicados deberán hacer frente también a una muta de 57.000 euros, condición que impuso la Fiscalía a la hora de suspender la pena de prisión.

El valor de la venta al público de los estupefacientes incautados por los agentes en los registros superaba los 230.000 euros, según el escrito de acusación de la Fiscalía, por lo que han sido condenados por un delito de tráfico con especial notoriedad. La sentencia, al reconocer los hechos, es firme.