El equipo de gobierno aprobará mañana iniciar los trámites para resolver el contrato del Mercado Central de Elche. Así lo aseguró ayer el alcalde, Carlos González, después de que Aparcisa le cancelara la reunión instada por el regidor para esta semana con el objetivo de zanjar de una vez el conflicto y tratar de negociar de una vez por todas la resolución de la concesión pública.
El primer edil descartó «más dilaciones, prórrogas y plazos», aunque sigue dispuesto a sentarse con la empresa para buscar un acuerdo y evitar llegar a los tribunales a través de una rescisión unilateral. Algo que parece a priori muy complicado pues la empresa sigue defendiendo a capa y espada el proyecto, aunque anteayer aseguró a este diario que barajaba un encuentro con el primer edil pero para la próxima semana, tras cancelar la de esta.
Mientras tanto, el equipo de gobierno va a activar la maquinaria de lo que se espera que sea un largo procedimiento para cumplir con lo que el pasado viernes prometió: romper el contrato si en el plazo de una semana no había respuesta de la mercantil. «No son acuerdos automáticos, se encarga a los departamentos municipales iniciar un procedimiento complejo, pero sí que se inician los trámites», advirtió el regidor socialista.
Con independencia de esta circunstancia personal del gerente de Aparcisa, «necesitamos tomar una decisión de inmediato», defendió Carlos González. De este modo, la junta de gobierno local aprobará mañana una moción, salvo sorpresas de última hora, para comenzar con la resolución del contrato, iniciar los trámites para declarar Bien de Relevancia Local (BRL) el refugio de la Guerra Civil hallado la pasada semana.
Además, el ejecutivo local pedirá a la Conselleria de Cultura paralizar las excavaciones arqueológicas de manera inmediata que ha solicitado realizar la empresa para seguir avanzando con su proyecto. «La empresa puede decir lo que considere al respecto, pero la voluntad municipal es que no siga y se tiene que cumplir inequívocamente», dijo Carlos González.
Con urgencia
Igualmente, mañana, reclamarán al Consell cubrir también con urgencia los restos arqueológicos del edificio de abastos que desde hace cinco años han generado quejas vecinales y de los negocios colindantes por la sensación de dejadez que presentan. «Es imprescindible para retirar el vallado y posibilitar una actividad normal en la plaza de las Flores y de la Fruita», reiteró el alcalde.
Con todo ello, el máximo responsable del equipo de gobierno destacó la necesidad de «continuar avanzando para resolver el problema» y descartó que esta maniobra por parte del equipo de gobierno sea «un desafío, un ultimátum o una bravuconada», respondiendo así a las críticas de los placeros del mercado provisional realizadas el día anterior sobre la postura del equipo de gobierno de finiquitar ya el contrato.
De nuevo, el alcalde justificó ayer su decisión de rescindir el contrato del Mercado Central en el hallazgo del refugio de la Guerra Civil, que considera incompatible con el desarrollo del aparcamiento subterráneo proyectado en el edificio de abastos, lo que se suma al impacto negativo del proyecto en el Misteri, advertido por Icomos, órgano asesor de la Unesco.
Ambos son los principales argumentos del equipo de gobierno para finiquitar la concesión. «Una vez encontrado el refugio, el entorno comercial de la ciudad exige respuestas y solo se hace tomando decisiones en la línea que hemos planteado, que pongan fin a la etapa iniciada por el gobierno 2011-2015 y que abran un proyecto de futuro al centro», concluyó el alcalde.
