La junta de gobierno local aprobó ayer destinar 700.000 euros a tres actuaciones como son la mejora de las pistas polideportivas de doce en centros educativos, la renovación del campo de césped artificial del Polideportivo de Carrús y el suministro de nuevos bolardos para la vía pública. Se trata, en su mayoría, de inversiones financieramente sostenibles, cuyos pliegos deben aprobarse antes de final de año para evitar que el dinero vaya a amortizar deuda.

Más de 500.000 euros irán a parar a la reforma de pistas polideportivas en doce centros educativos del municipio. El plazo de ejecución será de tres meses y beneficiarán al colegio San Antonio de la Hoya (en sus dos ubicaciones), Eugeni d'Ors, Vicente Blasco Ibáñez, Palmeral, Reyes Católicos, López Orozco, El Pla, Mediterrani, San Fernando, Candalix y Giner de los Rios.

«Se trata de la renovación de más de 18.300 metros cuadrados de pistas deportivas. No sólo se trata de repintarlas, sino de hacerlas nuevas completamente», señaló el portavoz de la junta de gobierno, Héctor Díez.

Por otra parte, el ejecutivo local dio luz verde a la sustitución de todo el tapiz de césped artificial del campo de fútbol de el Polideportivo de Carrús, así como la renovación total del sistema de riego del mismo. «Era una cuestión que era muy demandada por los usuarios de este espacio deportivo dada la mala situación en la que se encontraba el terreno de juego», explicó Díez quien añadió que esta actuación sale a licitación por un valor de 158.700 euros y un plazo de ejecución de un mes. La financiación procede en un 50% de los Fondos Edusi, y el otro 50% de inversiones financieramente sostenibles.

La tercera actuación es licitar el suministro de bolardos en la vía pública, un contrato de dos años prorrogable otros dos y la inversión es de 33.000 euros por cada uno de los años de contrato.

Recaudación

Asimismo, la junta de gobierno decidió ayer ceder a Suma el cobro del impuesto de plusvalías para reducir el trabajo y mejorar la eficacia recaudatoria. Algo que ahora no se produce con este tributo ya que al Consistorio ilicitano le pertenecía ingresar el pasado año 7,2 millones de euros (derechos reconocidos), frente a los 4,6 millones que recaudó, lo que supone casi un 40% de las «facturas» pendientes. Por la encomienda de gestión que quiere realizar el ejecutivo local a Suma, el Ayuntamiento deberá pagarle un 1 por ciento de lo recaudado, por lo que si el próximo año el Consistorio recibiera por este tributo 5,9 millones, debería abonarle a Suma alrededor de 59.000 euros. Una cifra que, en principio, el equipo de gobierno está dispuesto a asumir, al considerar que se verá compensado con ventajas para los ciudadanos y para la administración.

Pantallas antirruido

Por otra parte, la junta de gobierno acordó también pedir al Ministerio de Fomento pantallas antirruido en la autovía A-7, a su paso por Elche, para atajar las molestias vecinales que suponen un quebradero de cabeza para las viviendas situadas en la pedanía de Vallongas y colindantes al vial. El portavoz Héctor Díez reconoció que en numerosa casas de primera residencia el ruido supera los 70 decibelios, cuando no deberían de sobrepasarse los 55. Destacó también que es un buen momento para solicitar estas medidas que llevan años reclamando.