Las conversaciones sobre el cierre de establecimientos en el centro de Elche ya son más que habituales en bares o cafeterías. Cada cierto tiempo, explica un hostelero del centro de la ciudad, «tenemos que despedirnos de alguien, la situación va de mal en peor». Una situación que empezó dejándose sentir en un principio más en la Corredora, pero que en la actualidad se ha trasladado a otras calles y plazas del centro de la ciudad, como es, según denuncian los vecinos, la plaza de la Merced.
Este emplazamiento del casco histórico ilicitano cuenta con una plaza agradable, con fuente ornamental y bancos, y a su alrededor hay una parada de taxi, y la oficina del Prop de la Generalitat Valenciana, un organismo público. Un entorno que los expertos consideran adecuado para los negocios.
Sin embargo, destacan desde el sector, «de un tiempo a esta parte los establecimientos, algunos de ellos con varias décadas de antigüedad, han ido cerrando, y los emprendedores que han apostado por abrir, han podido aguantar muy poco tiempo».
En la plaza de la Merced de Elche hay una decena de locales en los que se puede instalar un comercio, pero en la actualidad solo quedan dos tiendas, ambas de moda y artículos infantiles, y dos cafeterías. El resto de locales están cerrados y con carteles de inmobiliarias que ofrecen el alquiler a quien se quiera arriesgar.
Una de las comerciantes que queda en esta zona es Ana San Leandro, que tiene una tienda de moda infantil desde hace más de cinco años. Esta comerciante se queja de que «sentimos que no tenemos ningún tipo de apoyo para salir adelante, y ya no resulta atractivo venir al centro de Elche de compras, como sí sucedía antes». Ana San Lorenzo asegura que «una parte del problema está en el alto precio de los alquileres, y que cada vez nos vemos obligados a reducir más los márgenes comerciales, con lo que vamos ahogados».
El precio para alquilar un local en la plaza de la Merced va desde los 1.000 euros. Los comerciantes aseguran que «no se encuentra nada más barato, por eso hace poco una comerciante se trasladó a otra zona, buscando un alquiler más asequible».
Junto a la tienda de Ana San Lorenzo, está la de Fernando Durá, aunque su entrada da a otra calle, Pere Ibarra. Este comerciante recuerda que «cuando llegué a la plaza a montar mi establecimiento estaba todo abierto, pero ahora cada vez quedamos menos comercios tradicionales, y sobrevivimos gracias a que tenemos la suerte de contar con una clientela fija, que es con la que salimos adelante».
En definitiva, una situación que cada vez es más frecuente en más calles del centro, en las que el comercio se mueve en busca de una solución que no llega.
Las ventas caen en picado en el sector de los servicios
Las ventas caen en picado en el sector de los servicios La situación económica del sector de los servicios de Elche es muy preocupante, según la Asociación de Empresas de Servicios de Elche (Aesec), donde destacan que durante el pasado verano las ventas cayeron de forma significativa. Una situación delicada que en muchos casos se tradujo en reducciones en la facturación del 40% en agosto, y en un 25% en septiembre. El panorama preocupa mucho al sector comercial que en el centro de la ciudad no está atravesando por un buen momento a la espera de que dé frutos el plan municipal para hacer mucho más atractivo el casco antiguo.
