Con un 33% de estudiantes extranjeros en la Comunidad Valenciana, y cerca de un 11% en Elche, la Universidad CEU Cardenal Herrera abrió oficialmente ayer el curso 2019/20 con el propósito de atraer al mayor número de estudiantes hispanoamericanos a la ciudad ilicitana como principal reto para el nuevo año académico. Esta no es la única meta que se ha fijado la institución, que también pretende culminar la remodelación de su primera sede en Elche, la del edificio de la calle Carmelitas, lo que le permitirá ampliar su oferta de titulaciones, entre ellas la de Odontología. Para ello, desde el CEU aseguran que deben hacer frente a las «trabas y trámites burocráticos y administrativos».
Al igual que ocurre con la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, con Juanjo Ruiz, la Cardenal Herrera también estrena este año rector, un Vicente Navarro de Luján que ayer encabezó el acto de apertura celebrado en la sede ilicitana. El nuevo dirigente puso el acento en la internacionalización. «Es positiva ya que trae hasta el CEU personas con altas calificaciones y buenos expedientes, lo que anima al conjunto de las aulas. La convivencia es enriquecedora y abre otros horizontes», señaló Navarro de Luján.
Hasta ahora las campañas de internacionalización de la Cardenal Herrera se han centrado en Asia y Europa. En el caso del viejo continente, en Elche es muy famoso el atractivo que tienen los estudios de Fisioterapia entre los estudiantes franceses, lo que se refleja en una importante comunidad de alumnos galos que pasan el curso en la ciudad ilicitana. Ahora la mirada de la Universidad cruza el Atlántico y pone el foco en Hispanoamérica. «Estos alumnos pueden obtener titulaciones que les sirven para todo el territorio Schengen, lo que es un horizonte profesional interesante. Los estudiantes encuentran un profesorado competente y salen satisfechos», indica el rector.
Obras avanzadas
Al margen de la apuesta por la internacionalización, este curso será clave para el CEU porque en él debe quedar prácticamente culminada la reforma de su primera sede, la del edificio de la calle Carmelitas, con la que la Universidad llegó a Elche hace más de 25 años. El edificio necesitaba una remodelación y ayudará a logar el impulso que busca la institución académica con sus nuevas titulaciones. Las obras están muy avanzadas y forman parte de un lavado de cara que actualizará tanto las aulas como los despachos de los profesores.
Hace un par de semanas Navarro de Luján ya avanzó que el CEU quiere traer a Elche Odontología, un grado que ya imparte en su centro de València y con el que no cuentan en la provincia ni la UMH ni la Universidad de Alicante. Esta es una de las grandes apuestas para la ciudad ilicitana, que se combina con los planes que la Cardenal Herrera tiene para el resto de la Comunidad Valenciana, como son los casos de Psicología en València o un grado de Deportes en Castellón en colaboración con el Villarreal CF, que ofrecería tanto el soporte como sus instalaciones.
Para poder materializar estos planes el CEU asegura que debe sortear demasiadas trabas burocráticas y administrativas. Así lo manifiesta Navarro de Luján: «Lo menos problemático son nuestros órganos internos. Pero también tenemos que pasar por la Agencia Valenciana de Evaluación y conseguir un permiso expreso de la Generalitat. Y luego pedir otro permiso también a la Aneca, por lo que en este proceso se nos van hasta dos años».
