El año judicial empezó oficialmente a mediados del pasado mes de septiembre, con muchas reivindicaciones pendientes pero también con buenas noticias, como la puesta en marcha de nuevos juzgados o unidades especializadas de atención a las víctimas de violencia de género. Vicente Pascual, que afronta su segundo mandato como decano del Colegio de Abogados de Elche, analiza la situación de la justicia en la ciudad.
¿Con qué asignaturas pendientes comienza este año judicial?
Este año llegamos con una buena noticia. El 31 de octubre se abre el nuevo Juzgado de lo Penal 4, demandado durante muchos años y que por fin se materializa. Los tribunales penales soportan una carga de trabajo muy importante. Esto no quiere decir que tengamos la planta judicial que necesitamos, estamos muy lejos de ello.
¿Cuál sería esa planta judicial ideal?
Es urgente que se cree un Registro Civil exclusivo, que abra una nueva sección de la Audiencia, la Séptima tiene una situación insostenible. También es necesario el Juzgado Social 4, y el segundo de Violencia de Género. Seguimos aspirando a un Juzgado de Menores de Elche, es la única jurisdicción de la que carecemos. Y también tenemos que pensar en un segundo juzgado de lo Contencioso Administrativo.
El año pasado abrieron dos nuevos juzgados civiles y aun así la jurisdicción está muy saturada. ¿Son necesarios más, o es cuestión de tiempo?
Normalizar la situación civil va a costar tiempo. Los juzgados del 1 al 6 tenían sobrecarga de trabajo y muchos asuntos por resolver, el trabajo no ha desaparecido. En el 7 y 8 que se han creado nuevos el trabajo debe y va al día. Todo lo que les entra se va despachando con rapidez. Lo que es necesario es que se vayan poniendo al día el resto. Se producirá porque la entrada de nuevos asuntos va a ser menor porque ya no se reparten entre seis, sino entre ocho. Pero el efecto no es inmediato. Tienen en sus armarios muchas causas pendientes, pero después de tantos años reivindicándolos no nos vamos a quejar porque el efecto no sea inmediato.
Ha mencionado el desdoble de la Audiencia. Esta ya funciona actualmente con dos salas y otra de refuerzo dedicada exclusivamente al Brugal. ¿Será suficiente con un desdoble?
La sección Séptima es una anormalidad. No existe en toda España una sección con esa dimensión, con ese número de magistrados. Conocemos, y está perfectamente ajustado, el ritmo del trabajo normal, cuando hay cuatro magistrados, un secretario judicial y un número de funcionarios. En la Sección Séptima lo que se ha ido haciendo es ir poniendo parches, incrementando número de magistrados, de funcionarios? Al final lo que ha producido es una hipertrofia en parte ordenada y en parte desordenada, y un órgano judicial que no está pensado para tener esas dimensiones. ¿Por qué en Madrid no hay una sección de la Audiencia con tal enorme numero de magistrados? No la hay porque lo razonable es que si hay más trabajo se crea una nueva. ¿Por qué si eso es lo razonable no se hace en Elche? Nadie tiene respuesta para esa pregunta.
¿Confían en que sea una realidad el año que viene?
Es arriesgado hablar de que confiamos en una cosa u otra. En base a la experiencia reciente, hay que destacar que tras 10 años de sequía en menos de dos años se han creado tres tribunales. Creo que no va a ser un cosa excepcional. La Conselleria es consciente de la infradotación que tiene Elche, y creemos que el ritmo de creación de tribunales va a ser sostenido. No me atrevo a aventurar qué juzgado tendremos próximamente pero sí quiero confiar en que lo ocurrido en materia de creación de nuevos juzgados estos dos últimos años no va a ser excepcional, sino un proceso sostenido y mantenido en el tiempo y eso sería muy bueno.
El hecho de que solo haya un juzgado de Violencia de Género hace que no se puedan hacer turnos de guardia el fin de semana. ¿Cómo afecta eso a los profesionales y, sobre todo, a las víctimas?
Que no haya un segundo juzgado lo que produce es ineficiencia en el servicio público de la Justicia. Los asuntos que ocurren el fin de semana llegan al juzgado de Instrucción de guardia. Las resoluciones que se adopten ese fin de semana llegan a la mesa del juez de violencia el lunes. Y entonces hay que repetir, ratificar, y convalidad lo que ya se ha visto. Al final se duplica el trabajo, y de cinco días que trabaja ese juzgado, el lunes está atendiendo el trabajo de sábado, domingo y el propio lunes. Lo sufrimos con los abogados de oficio, para los que el lunes es una locura. Y sobre todo lo sufren las víctimas, que se enfrentan a contarlo todo el juez dos veces.
¿En el turno de oficio se han resuelto los impagos y atrasos pendientes?
Sí, la Conselleria se ha puesto al día y aunque siempre hay cosas que mejorar, la situación ha mejorado mucho.
