Menos medusas y más peces araña en las playas de Elche. Los socorristas que trabajan en el litoral ilicitano realizaron durante el pasado mes una media de 25 actuaciones al día a pie de playa, y más del 80% de actuaciones fueron por picaduras a bañistas. Las medusas han dado tregua este año, tras el quebradero de cabeza que supuso la aparición de la carabela portuguesa el año pasado, pero han aumentado las picaduras de los peces araña, que se esconden bajo la arena y pican cuando se les pisa, inconscientemente, y cuya picadura es muy dolorosa. Así lo aseguran desde Ambumar, la empresa que presta el servicio de salvamento en la ciudad. Las prematuras altas temperaturas que se han registrado este verano han contribuido a calentar el agua más pronto de lo que lo hizo el año pasado, lo que favorece que las medusas se alejen de la orilla, disminuyendo las picaduras.

Los diferentes puestos de salvamento repartidos en las seis playas de Elche (El Altet, Arenales, Carabassí, El Pinet, La Marina y El Rebollo) atendieron durante el mes de julio a 585 personas por la picadura de algún pez o medusa. Es la incidencia estrella de las playas. Los datos hablan por sí solos, pues la segunda causa de atención médica más frecuente son las heridas producidas por algún tipo de incidentes, y por esta causa se realizaron 80 atenciones. La playa de Arenales, la que más bañistas concentra de todo el término municipal, es donde más curas se realizaron por picaduras: 158. Le siguen, con el mismo número de atenciones, El Pinet y La Marina, con 128 en cada puesto de socorrismo. Las picaduras, pero esta vez de insectos, completan la estadística, pero son insignificantes con respecto al resto de atenciones, con un máximo de 10 casos en El Carabassí.

De esta forma, las actuaciones del servicio de salvamento van mucho más allá de los rescates de bañistas. De hecho, en este sentido, durante el pasado mes tan solo se han realizado, por suerte, nueve rescates. Una tercera parte de ellos tuvieron lugar en la playa de El Rebollo, la más conflictiva en este sentido por las características de este punto del litoral, donde son frecuentes las corrientes de agua. Le siguen a Playa de La Marina y Arenales, con dos actuaciones de este tipo en cada una de ellas. En El Carabassí y El Pinet tan solo se realizó un rescate en el mes de julio, mientras que En Altet no se produjo ninguna incidencia de este tipo. De hecho, esta playa es la que menos actuaciones registró por parte del servicio de socorrismo el pasado mes, con 49 intervenciones. Arenales, en este sentido, Cuadriplicó la cifra, con 193, debido al gran volumen de usuarios que registra. La seguieron La Marina (163), El Pinet (137), El Carabassí (108) y El Rebollo (96).

Banderas

La baja cifra de rescates puede explicarse debido a la baja frecuencia de banderas rojas, lo que a priori garantiza un baño tranquilo. De hecho, en la playa más numerosa, la de Arenales, tan solo se izó la bandera roja durante el mes de julio en tres ocasiones, mientras que durante otra jornada se pasó de la amarilla a la roja. La bandera verde predominó en esta playa durante 15 días, la mitad del mes, con otras seis jornadas en las que se pasó de verde a amarilla, mientras que otros seis días predominó la amarilla. Cifras similares se registraron en El Carabassí y El Altet, payas colindantes a Arenales, mientras que las más conflictivas en este sentido fueron La Marina y El Rebollo, con tan solo 10 días de bandera verde. También fueron las que más banderas rojas registraron, con cuatro jornadas con el baño prohibido por las corrientes. Los otros ocho días del mes predominó la bandera amarilla, mientras que en otras ocho jornadas se pasó de la bandera verde a la amarilla y en otra ocasión se pasó de amarilla a roja. El Pinet se queda cerca, con 11 días de bandera verde. Por suerte, no se ha tenido que recurrir a sanciones para, en las jornadas de bandera roja, sacar a los bañistas del agua.