120 kilos de pólvora, el máximo permitido, se volatilizaron ayer en la sesión inaugural del XI Concurso de Mascletaes Festes d'Elx, que arrancaba a las 14 horas. La pirotecnia Ferrández de Redován ofreció un espectáculo cercano a los seis minutos y 36 segundos, marcado por la intensidad a lo largo de todo el episodio . Numeroso público estaba expectante y ansiaba disfrutar de este evento pirotécnico que sus responsables, los hermanos Manuel y Joaquín Ferrández, calificaban, antes de iniciarse, de «impresionante y potente». Lo cierto es que los asistentes aplaudieron con ganas tras vibrar literalmente con los terremotos aéreos y terrestres y los fuegos chispeantes sobre Traspalacio. Desde las siete de la mañana hasta pasado el mediodía, doce operarios realizaron el montaje, entorpecido al comienzo por una lluvia intermitente que no tuvo consecuencias afortunadamente.