Un hombre de 43 años murió ayer tras impactar con una señal en la CV-875, la carretera de Matola. Al parecer, según trasladaron a este diario fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, la víctima perdió el control de la moto y acabó impactando con la señalización. El golpe fue tan fuerte que, pese a los esfuerzos de la unidad del Servicio de Atención Médica Urgente, desplazada hasta el lugar de los hechos tras recibir el aviso, no se pudo hacer nada por salvar su vida.

El Centro de Información y Coordinación de Urgencias (Cicu) recibió el aviso al 112 alrededor de las 14.35 horas. Rápidamente se movilizó el dispositivo sanitario y la Guardia Civil de Tráfico acudió al lugar para regular la circulación y levantar acta de lo ocurrido. Los médicos trataron de reanimarlo y trasladarlo al hospital, pero la gravedad de las heridas desencadenó en el fatal desenlace. Por el momento, se desconocen las causas que le llevaron a perder el control de la motocicleta, pues no hay ningún otro vehículo implicado en el accidente.

El fuerte impacto podía observarse ayer en el punto del accidente. La señal quedó doblada debido al fuerte impacto, lo que da una idea de la magnitud del golpe. Los efectivos policiales tuvieron que regular el tráfico, pese a que a esas horas, debido al calor y al periodo vacacional, el tránsito de vehículos era escaso. Los conductores y vecinos que presenciaron el accidente quedaron impactados y mostraron su conmoción por lo ocurrido.

Segundo del verano

Se trata del segundo accidente mortal de este verano en Elche. A principios de julio, cuando un hombre de 56 años murió tras un choque frontal entre dos vehículos que dejó a otro joven de 22 años en estado grave en el camino viejo de Santa Pola. La gravedad del choque fue tal que tuvieron que intervenir los bomberos para poder excarcelar al joven, pues ambos turismos quedaron destrozados.

Este suceso sirvió para proliferar la reivindicación del desdoblamiento de la carretera de Santa Pola, pues durante el periodo estival, los desplazamientos a la villa marinera se cuentan por miles, originando numerosos colapsos y accidentes.