El sindicato CC OO hizo público ayer un informe, con base en datos del SEPE, Servef, Seguridad Social, INE y Conselleria de Economía en el que desgrana cómo ha cambiado el mercado de trabajo en Elche durante los últimos cuatro y, aunque a priori las cifras inviten al optimismo, porque se han ganado más de 11.500 afiliados y el número de personas desempleadas se ha reducido en más de 6.500, pasando de 29.243 a 22.699 (22,3%), otros, en cambio, siguen recordando que el trabajo que se crea no es estable, no es de calidad y sigue penalizando a la mujer que, de hecho, ha perdido en este cuatrienio un punto y medio en cuanto a contratación. Comisiones Obreras, explica, ha querido hacer una radiografía más amplia de lo habitual, cogiendo un periodo que va de junio de 2015 a junio de 2019, que coincide prácticamente con el último mandato en las municipales, aunque el peso que el Ayuntamiento puede tener en la creación directa de empleo sea muy relativo más allá de los programas que impulsa a través de las escuela taller o des las convocatorias de oferta pública.
En Elche, hay 85.024 personas afiliadas a la Seguridad Social, que eran 73.431 en junio de 2015, por lo que ha crecido en un 15,79%. Por lo que se refiere a los contratos, las cifras no indican que se haya ganado en igualdad. En 2015, el 54% se realizaban a hombres y el 45,9% restante a mujeres; en 2019, el porcentaje de varones que se emplea sube al 56,1% y el de mujeres baja al 43,8%. «Lo que es un dato a tener en cuenta -dice el informe del sindicato- es que las mujeres salen peor paradas, tanto en desempleo como en contratación, prestaciones y pensiones. Por lo tanto, los 'techos de cristal' están ahí, pero la desigualdad permanece más en este colectivos. Por ello es necesario hacer todo lo posible para invertir los términos y mejorar las condiciones laborales de las mujeres en el presente para tener un mejor futuro».
Mejora los contratos indefinidos, que son el 12%, cuando hace cuatro años eran el 10,7. «Hay un cierto aumento moderado de los datos de la contratación, si bien muy lejos de lo que se debe entender como empleo de calidad. Las cifras de contratación temporal están sobre el 88% y con una diversidad en la duración de los mismos», explica el informe.
¿Dónde se ha reducido más el paro en estos cuatro años? Porcentualmente, en la industria y en la construcción, mientras ha crecido en el sector servicios (que es el mayoritario pues agrupa al 57% de los demandantes de empleo). 13.092 personas hasta el pasado junio estaban inscritas en la búsqueda de trabajo, cuatro puntos y medio más que hace cuatro años. En cambio, hay menos ciudadanos que busquen un contrato en la industria, 5.764 (25,3%), cuando hace cuatro años eran algo más de 8.000 (27,5%); o en la construcción, pues son 1.622 (7,1%) cuando en 2015 eran 2.814 (9,6%). En cambio, la agricultura, prácticamente residual pues sólo hay 705 parados (3,1%), se ha reducido el número en cuatro años, desde los 791 de 2015, pero aumentado el porcentaje sobre el total. Los parados sin empleo anterior son ahora 1.500 (6,6%) mientras hace cuatro años eran 2.086 (7,1%). La preocupación del sindicato sigue siendo esas más de 22.000 personas sin trabajo y lo que están percibiendo como ayudas. Así llama la atención que haya subido el número de personas que percibe el desempleo contributivo (el que corresponde a las cotizaciones hechas) con 4.214 personas sobre los 22.699 desempleados cuando hace cuatro años eran solo 3.739 para 29.243 parados. En cambio, el porcentaje de personas que cobra el subsidio ha aumentado al 24,8% (5.641) en 2019 por el 22,2% (6.515 beneficiarios) de 2015.
Otro dato importante es que a junio de 2019 el sistema daba cobertura, de algún tipo, a un mayor número de desempleados, prácticamente la mitad pues son 11.098 (48,8%), cuando hace cuatro años sólo se beneficiaban del mismo el 44,6% (13.044). En estos momentos, la renta activa de inserción beneficia a 1.243 desempleados, un 5,4% cuando en 2015 eran más de 2.200 (7,6%).
Y siempre... la economía sumergida
Comisiones Obreras destaca que el principal problema que hay en Elche a la hora de hablar de subsidios o pensiones, reside en que es una ciudad que «viven», en parte de la economía sumergida. «Siendo esta lacra un ma en tres fases, para la sociedad porque no genera ingresos a las arcas públicas, para las personas, que no generan derechos para prestaciones ni pensiones ni para las empresas porque existe una competencia desleal entre las que cumplen sus obligaciones y las que no».
Tres mil pensionistas más que en 2015
Una jubilada percibe por término medio 660 euros mientras que un jubilado alcanza los 1.008 euros
En el capítulo de pensiones, ha crecido el número de beneficiados en Elche durante los últimos cuatro años. En total son, a junio de 2019, 39.462, 3.200 más que en 2015 (36.082) y, uno de los pocos datos beneficiosos para las mujeres, es que ha aumentado en tres puntos y medio el número de las beneficiadas.
Si hace cuatro años eran el 46,4 por ciento ahora prácticamente son la mitad, exactamente, el 49.93%, otra cuestión es que lo que recibe la mayoría, que es por jubilación, es muy inferior a lo que perciben los varones.
Nada más ni nada menos que 348 euros al mes. En total, hay 16.374 ilicitanos son perceptores de una pensión de jubilación que, de media, se sitúa en 1.008 euros; mientras que las mujeres, que son 8.767, perciben solo 660 euros.
En el resto de pensiones, el capítulo más importante es el de viudedad, 9.792 en total, que perciben, primordialmente, mujeres (9.154), con una percepción media de 613 euros. En Elche, por último, 1.474 personas perciben la de orfandad, fijada en 344 euros mensuales.
