Imposible descansar por culpa del ruido de las trampillas del alcantarillado. Margarita Berenguer, una vecina del barrio de Altabix, lleva dos meses sufriendo el ruido instenso que provoca el paso de un vehículo sobre las tapasde alcantarillado instaladas en la calle Ilicitano Ausente, esquina con Alfredo Mira Grau, al no estar completamente selladas.

Esta vecina solo pide que se sellen las trampillas debidamente para poder descansar por las noches. Asegura que cuando los coches pasan por encima el ruido es ensordecedor: «Con esta ola de calor tenemos que abrir todas las ventanas, pero el ruido se mete en la casa y es imposible vivir así. Es un infierno». Tal es la molestia que incluso ha interpuesto una queja tanto en la Oficina Municipal de Atención al Ciudadano (OMAC) y en Aigües d'Elx: «Queremos una solución ya».

Según explica esta vecina de Altabix, los técnicos de Aigües d'Elx acudieron a supervisar las trampillas la semana pasada. De cuatro que no estaban selladas, solo han marcado dos.

Dos meses de calvario

«Hace dos meses que vivo con estos ruidos. Acudí al Ayuntamiento de Elche y me dijeron que actuarían, pero no ha sido así hasta el momento», dice Margarita. Lo siguiente que hizo fue llamar al servicio de Aigües d'Elx. Hace mucho calor y dormir con las ventanas cerradas es totalmente inviable. «Una vez que han señalado las trampillas, por aquí no ha pasado nadie a arreglarlas», lamenta.

Hay solución

Berenguer está segura de que su demanda se puede solucionar porque «hace unos años pasó lo mismo; me quejé al Ayuntamiento y al día siguiente lo resolvieron».

El último paso lo ha dado esta semana interponiendo las dos quejas para así dar constancia de lo que sucede en su calle. «No me gustaría poner una denuncia, pero ya no sé qué más hacer para que esto se solucione», comenta Margarita, quien asegura que es su derecho quejarse porque «pago mis impuestos, que no son pocos». Ninguno de los vecinos de la zona ha mostrado su molestia por los ruidos a pesar de que son conscientes de ello. «Se conforman con lo que pasa porque no saben que se puede arreglar», explica.

Ahora todo queda en manos de Aigües d'Elx y del Ayuntamiento de Elche para que se sellen cuanto antes las cuatro trampillas que no dejan de ser una gran molestia en el barrio de Altabix.