Un pequeño caos y más de un inconveniente se generaban ayer por la mañana en la calle Teniente Ruiz de Elche a raíz del cambio de lado para estacionar los vehículos que cada 1 de julio y 1 de enero debe realizarse obligatoriamente. En esta calle, las señales verticales indican, a lo largo de varios tramos de la calle, que cada seis meses la banda de aparcamientos debe formarse y trasladarse de un extremo al otro. Pues bien, ya sea los unos por los otros, ayer por la mañana dicha calle amanecía sin que los vehículos estacionados hubieran cumplido con lo establecido. A partir de aquí, una vez advertida esta situación por la Policía Local, sobrevino un pequeño desorden y también algo de confusión entre los conductores.

Y es que aunque en un principio se esperó un tiempo prudencial a ver si aparecía algún que otro conductor para que retirara de forma voluntaria su vehículo, finalmente, con gran amabilidad y paciencia, los efectivos policiales no tuvieron más remedio que llamar a la grúa municipal y comenzar a multar hasta cierto punto, puesto que la mañana avanzaba y la situación no mejoraba, sino todo lo contrario.

En cualquier caso, la calle Teniente Ruiz se vio colapsada durante parte de la mañana. Por un lado, estaban los vehículos aparcados y, por otro, los que pasaban por allí y pretendían aparcar en el lado correcto. La calle es tan estrecha que esto desembocó en que nadie pudiera circular por la misma.

Cerrada al tráfico

Ante esta situación, la Policía Local optó por cruzar un vehículo en la intersección con la avenida Juan Carlos I, mientras que una grúa también se situó durante un tiempo en el cruce con la calle Velarde. Así las cosas, la escena era, por una parte, vehículos que ya se habían introducido en la calle y que, finalmente, habían optado por aparcar en el lado correcto a pesar de que el otro lado no estaba totalmente liberado. Y por otro, coches que, de la noche a la mañana resultaban estar mal aparcados, siendo retirados por la grúa municipal o bien por presencia in extremis de alguno de sus propietarios.

En cualquier caso, esta situación hace tiempo que no ocurría en Elche, al menos en calles del centro, ya que los vecinos que residen en la zona suelen estar atentos y pendientes de cumplir con la ordenación y el estacionamiento de los vehículos.