La Policía Local de Elche detuvo a un hombre de 35 años el martes, sobre las 8 horas, tras una persecución que comenzó cuando una patrulla observó el turismo que conducía rebasando dos semáforos en rojo en la avenida de Santa Pola. Los agentes lo siguieron para darle el alto pero el conductor aumentó la velocidad e inició una brusca persecución con continuos cambios de carril y adelantamientos por el arcén de la carretera de Santa Pola, poniendo en riesgo al resto de conductores y a los ciclistas que a esa hora de la mañana acudían a hacer deporte o a desplazarse al trabajo.

El conductor llegó hasta la Vereda de Sendres, invadiendo el carril contrario en adelantamientos «claramente temerarios», según indicaron desde la Jefatura de la Policía Local. Tras desviarse hacia Dolores y San Fulgencio, terminó impactando contra la mediana, lo que ocasionó el reventón de una de las ruedas, saliendo del carril e invadiendo de nuevo el contrario. La unidad policial, que mantenía a la vista su vehículo, aprovechó esta circunstancia para cerrarle el paso con el coche patrulla. Entonces, el conductor embistió contra éste, aunque el coche se detuvo y los agentes aprovecharon para romper la ventanilla para detenerlo. El arrestado opuso resistencia y forcejeó con los agentes hasta caer por un terraplén antes de que lograran inmovilizarlo.

El hombre pasó ayer a disposición judicial y la magistrada de guardia dictaminó la retirada del carné de conducir antes de quedar en libertad con cargos. La Policía Local sostiene ya que ya protagonizó un incidente similar hace meses, y que lo único que encontraron el vehículo que pudiera justificar la huida fueron pequeñas cantidades de estupefacientes.